La escasez de billetes en el país golpea a los vendedores del estadio Universitario, quienes han tenido que implementar métodos de cobro alternativos para asegurar que tendrán algo de ganancias, aunque sea menor que en temporadas anteriores.
Julio Díaz trabaja en el parque de la UCV desde hace 23 años y que solo acepta transferencias de los fanáticos que van con mayor frecuencia al estadio.
No acepto transferencias de todos, también cobro primero al que no conozca y a los que siempre vienen les acepto las transferencias, todos me la han pagado, agregó Díaz.
El punto de venta se ha hecho indispensable en cualquier establecimiento del centro deportivo, de lo contrario, las ganancias en partidos como Caracas-La Guaira o Caracas-Magallanes podrían ser muy bajas de no tener esta alternativa de pago para los consumidores.
Díaz explicó que la empresa suministra el punto a los vendedores para no perder el ingreso. La venta de bebidas alcohólicas varía según el rival que toque disputar el encuentro contra Leones del Caracas, vendí seis cajas (de cerveza) y media en el juego contra Caribes y contra Magallanes se venden entre 15 y 16.
El trabajador aclaró que la ganancia de las bebidas es para el mismo vendedor y no se dividen entre varios, lo que yo venda es para mí y más bien yo le pongo Bs 2.000 más porque sino no le gano nada.
A pesar de la hiperinflación registrada en Venezuela, muchos fanáticos de la pelota venezolana buscan asistir a los partidos aunque tengan que limitar el consumo dentro del estadio, reseñó El Nacional.
