No hay respeto a lo cada queda ciudadano piensa. “Soy chavista pero no madurista y hasta ahora habían respetado mi posición. El martes pasado el director me dio la planilla y sin más me dijo que si no colaboraba con la revolución me atuviera a las consecuencias”, contó un empleado de un ministerio.
Fuentes sindicales del Metro de Caracas dijeron que el presidente propatronal del sindicato de la empresa, Edison Alvarado, colocó en los escritorios o entregó a cada trabajador la planilla y en el correo interno advirtió “que tienen que acompañar a los anotados a la hora de votar”.
Trabajadores petroleros de la Costa Oriental del Lago refirieron que los jefes también les entregan las planillas acompañada de la orden de que el 30 de julio deben tomarse una foto con cada elector en el toldo rojo cercano al centro de votación.
“En lugar de una campaña electoral, los dirigentes sindicales del oficialismo que también son candidatos a la constituyente como Alvarado y Wills Rangel, presidente de la Federación de Trabajadores Petroleros de Venezuela, realizan una campaña de terrorismo laboral con estas prácticas”, afirmó un trabajador del sector petrolero.
Las fuentes precisaron que el acoso a los empleados públicos es parte del sistema 4×4, consistente en usar las instancias de los CLAP, Movimiento Somos Venezuela, las UBCh y el carnet de la patria para presionar a votar a los habitantes de las comunidades.
Sobre el paro cívico, uno de los voceros indicó que el gobierno ordenó a los organismos poner sus flotas a la orden para trasladar a los trabajadores hacia los centros de labor.
Con información de El Nacional