El rendimiento laboral de un trabajador permite conocer los aspectos que se deben evaluar para mejorar la productividad de una empresa. Por tanto, todo debe ser evaluado: desde la capacitación del recurso humano hasta las tareas asignadas. Anónimo
El desempeño laboral es el rendimiento que un trabajador refleja al momento de realizar las actividades que se le asignan. De esta manera, se considera si la persona es apta o no para el puesto asignado. Se trata de la eficacia, la calidad y la eficiencia de su trabajo.
El rendimiento laboral es aquello que produce un empleado o un equipo de trabajadores. En cambio, el desempeño es la manera cómo estas personas cumplen con cada una de las tareas y funciones que se le han asignado.
Las empresas, para crecer y desarrollarse, necesitan realizar una evaluación del rendimiento laboral. Ésta permitirá conocer qué aspectos se pueden mejorar, cómo gestionar las tareas de manera eficaz y qué decisiones concebir y adoptar para alcanzar las metas y objetivos.
La evaluación del rendimiento laboral de los trabajadores es imprescindible en cualquier empresa. Conocer cómo medir su productividad para que los resultados se ajusten al máximo a la realidad que se busca alcanzar y contar con datos fiables resulta importantísimo.
A pesar de todo el esfuerzo que hacen las empresas para establecer un proceso eficiente de evaluación del rendimiento laboral y de todos los recursos y tácticas que se utilizan tendentes a lograr un alto rendimiento del factor humano, el resultado no siempre es satisfactorio para las expectativas organizacionales. El motivo de esta verdad obedece a muchas causas, entre las que se mencionaran figuran las siguientes:
1.- El ocupante del cargo: no tiene las capacidades necesarias pará ejercerlo. Entendiéndose como capacidad laboral el conjunto de conocimiento, habilidades, destrezas, aptitudes y/o potencialidades de orden físico, mental y social que permiten desempeñarse en un cargo en particular.
Esto se debe a que hubo falla en el proceso de reclutamiento, selección y empleo o puede deberse a que los programas de capacitación y entrenamiento no han sido lo suficientemente eficaces para detectar y desarrollar las competencias de los trabajadores para que cumplan óptimamente con los deberes y responsabilidades de los cargos
2.- Existe desgano del trabajador por no estar identificado con la misión, metas y objetivos estratégicos. Puede entenderse como “apatía laboral” a uno de los fenómenos psicológicos relacionados con los malestares más habituales en el ámbito laboral. En un sentido general, sería la falta de interés y motivación en el trabajo o actividad actual que pide la labor particular a cumplir.
Este fenómeno ocurre cuando ha fallado el proceso de comunicación a nivel de toda la organización y, por dicho desconocimiento, hay total separación.
3.- Desconocimiento de los objetivos y propósitos del cargo de parte del ocupante del mismo. Usualmente, esto es por una falla en la gestión del talento humano en las empresas, por cuanto en el proceso de inducción del nuevo trabajador o cuando ha sido promovido a un nuevo cargo, no se le informa en detalle la importancia del cargo a ocupar y cómo colabora su aporte al logro de metas y objetivos de la empresa.
La planificación estratégica es importante para una empresa porque radica en el hecho de que la misma determina la dirección general de la misma.
4.- Existe un estilo supervisorio de control y vigilancia. El estilo de supervisión depende generalmente del nivel de autonomía de los trabajadores, de sus fortalezas y su conocimiento. Cuando los seguidores demuestran inmadurez en su comportamiento y la falta de cumplimiento de sus niveles de productividad, se hace necesario que el supervisor inmediato adopte el estilo de dirección que le garantice el mejor comportamiento de sus colaboradores.
Un control supervisorio está conformado por un conjunto de operaciones encaminadas a vigilar el estado de un sistema con la finalidad de elaborar las acciones de control necesarias que permiten mantener las condiciones de no perturbación en el accionar.
Entonces, si se requiere desarrollar un estilo supervisorio de seguimiento y vigilancia, esta realidad puede traer como consecuencia mayor descontento y disminución en los niveles de productividad de los trabajadores, por cuanto con este estilo de supervisión no se le brinda confianza ni autonomía de desempeño en el cargo.
5.- Falta de recursos (material) para llevar a cabo eficazmente las tareas y responsabilidades del cargo. La asignación de recursos se refiere al proceso en el que se identifica y asigna los recursos disponibles para una determinada iniciativa.
La asignación efectiva de recursos permite usar correctamente los recursos del equipo, maximizar los resultados y respaldar los objetivos del equipo de trabajo. Para crear un plan de asignación de recursos se necesita identificar los recursos adecuados (miembros del equipo, herramientas, presupuesto, etc.) necesitados para cumplir con los propósitos formulados.
Desarrollar un plan de gestión de recursos brinda visibilidad constante del volumen de trabajo de los colaboradores por separado y del equipo en conjunto. Permite equilibrar todos los recursos de manera eficaz y poder ver el panorama general de cómo las personas y el equipo están alcanzando o no los niveles de rendimiento requeridos.
6.- Las condiciones físicas del lugar de trabajo son inadecuadas. El tener iluminación, ventilación, aseo, orden, estímulos visuales y auditivos, climatización, seguridad, entre otros factores, afecta el confort y el ánimo del trabajador, convirtiéndose el ambiente físico en un factor determinante del rendimiento laboral.
Se puede entender que una persona trabaja en condiciones negativas cuando el trabajo involucra situaciones que afectan negativamente la salud personal; por ejemplo, hacinamiento, incomodidad, acoso, ambiente inadecuado, poca ventilación, mala paga o paga atrasada, mal clima laboral, horas excesivas de trabajo.
Todos estos componentes afectan directamente el rendimiento de los trabajadores y trae como consecuencia una situación de alerta a la empresa, por cuanto si los trabajadores no están rindiendo como lo espera la organización, ésta está en peligro de desaparecer por los bajos niveles de rendimiento de su recurso humano: el más valioso de todos los recursos.
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