El volante deslizante del coche de Lewis Hamilton (Mercedes) que captó hoy jueves la cámara que se encuentra en el bólido sobre el piloto fue el asunto de mayor interés en la segunda jornada de los ensayos de la pretemporada de la Fórmula Uno que se está desarrollando en el Circuito de Barcelona-Cataluña.
A falta de grandes tiempos, las primeras cuatro horas de ensayos tuvo a todo el mundo con la vista puesta en la pantalla cuando aparecía Lewis Hamilton en una imagen subjetiva, viéndole conducir el coche desde encima de su casco. En cada recta, Hamilton tiraba hacia sí el volante, que se le acercaba al pecho, y a la vez las dos ruedas delanteras convergían ligeramente. Las probaturas de este experimento no trajeron grandes tiempos al coche seis veces campeón del mundo de forma consecutiva (1:18.387), pero animó la sala de prensa y el paddock el debate acerca de su legalidad, algo que motivará una larga discusión.
La incógnita es si este movimiento de volante, que solo realiza el piloto en las rectas, ya que en las curvas lo devuelve a su posición habitual, afecta a la suspensión, en cuyo caso sí que podría incurrir en una irregularidad. La jornada matinal de hoy volvió a tener a un coche impulsado por motor Mercedes como más rápido, como sucedió con el del mexicano Sergio ‘Checo’ Pérez (Racing Point), con un tiempo de 1:17.347, seguido de Daniel Ricciardo (Renault). El McLaren del británico Lando Norris, quien reemplazó en la jornada de hoy al español Carlos Sainz, fue el más lento de la matinal y uno de los que menos vueltas dio (48), aunque la escudería británica no reportó ninguna incidencia.
Por su parte, Charles Leclerc volvió a tomar el Ferrari, a la espera de que Sebastian Vettel lo haga esta tarde, mientras que en las probaturas de Lewis Hamilton con el Mercedes obtuvo tiempos muy discretos (1:18.386) y alejados a los de ayer, aunque completó una jornada muy provechosa, en la que dio 106 vueltas.
