El cansancio no los detuvo. A pesar del sol y los kilometros de camino los manifestantes de Santa Rosa llegaron a la Defensoria del Pueblo.
Fue una hora y media de camino, las fuerza de los señores mayores es sorprendente. Gritaban «por mis hijos y por mis nietos», su lucha es por ellos.
La Defensoría está tomada por la Guardia Nacional Bolivariana (GNB).