Jóvenes son principales impulsores de contagios de COVID-19 en las Américas, dice OPS
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De acuerdo a cifras publicadas por la Organización Internacional para las Migraciones, el 60 por ciento de las personas que se han ido de Venezuela a otras naciones, son menores de 35 años, es decir, jóvenes.

Se fueron huyendo de la crisis y en busca de un futuro mejor. La mayoría lo ha logrado, el resto está en vía, porque todo depende del momento en que se decide partir.

Este Día de la Juventud lo celebrarán muchos de nuestros jóvenes desde las distintas naciones que les han dado la oportunidad de labrarse un futuro. Como es de imaginar, las experiencias son muchas, pero el norte es el mismo.

España, un destino atractivo

Eduardo González se graduó de psicólogo en la Universidad Arturo Michelena, donde también hizo una maestría. Comenzó a trabajar pero los ingresos que recibía no le alcanzaban, lo que lo llevó seriamente a pensar en buscar otro destino que le resultara mejor económicamente.

Mientras decidía a qué país de Latinoamérica viajar, un familiar le pidió que lo acompañara a Málaga, España. Una vez allí llamó a su madre para decirle que no regresaría a Venezuela.

Con un amigo consiguió inicialmente un trabajo como despachador a domicilio. Justo en esa faena, conoció a un señor que le propuso que trabajara con él en una empresa , donde desde hace un año está ganando un sueldo que le permite vivir cómodamente, mientras termina de adaptarse.

Estabilidad en EE.UU

Carlos López se fue a España hace seis años. Allí vivía su hermano, quien había emigrado dos años antes, por lo que pudo recibirlo. Con 27 años le costó conseguir un trabajo estable, por lo que con la ayuda económica de su hermano decidió viajar a Estados Unidos. Inicialmente llegó a Miami, donde fue contratado para lavar carros en un concesionario.

Su forma de ser y el empeño que le puso a las tareas encomendadas le permitió ser tomado en cuenta por sus jefes, quienes en poco tiempo lo contrataron como vendedor de autos.

Lo asignaron a otro concesionario en Texas donde le ha ido muy bien con las ventas, al punto que ya tiene su propio vehículo, así como su esposa y una vivienda. Sus ingresos le permiten ayudar a su familia en Venezuela, que fue lo que siempre quiso.

Una oportunidad en Perú

Rosangel se casó con Martín en el 2015. Vivían en Los Guayos y nunca pensaron que la situación del país los obligaría a radicarse en otra nación.

No por moda sino por necesidad, decidieron viajar a Perú donde comenzaron vendiendo alimentos, gracias a un dinero que les prestó un amigo. Ahorraban todo lo que podían, lo cual les dio frutos porque pudieron arrendar un local y manejan su propio negocio.

Con regularidad mandaban dinero a sus familiares en Venezuela, pero el último año no les fue tan bien por efectos de la pandemia.

Sin oportunidades de estudio

El presidente de la Federación de Centros Universitarios de la Universidad de Carabobo, Marlon Díaz, al analizar la situación dijo que Venezuela vive un entorno sumamente complicado, porque muchos jóvenes han tenido que abandonar a su familia y al país para buscar mejores oportunidades sin saber que les espera.

Y eso ocurre porque en Venezuela no existen las condiciones necesarias para que los jóvenes se puedan desarrollar, para construir un futuro digno que incluya a su familia y un techo donde vivir, detalló.

Díaz subrayó que en el país tampoco hay oportunidades de estudio, porque a pesar de que las universidades públicas siguen abiertas y los estudiantes luchan para que eso se mantenga, muchos carecen de recursos para pagar transporte, guías, libros y ropa.

Por eso muchos jóvenes se han ido, en muchos casos caminando, hacia otras naciones, con la esperanza de conseguir un trabajo que les permita una calidad de vida adaptada a los tiempos modernos.

Díaz comentó además de que a pesar de que han muerto muchos jóvenes en medio de protestas contra el gobierno y a manos del hampa, todavía hay muchos que siguen luchando porque están convencidos de que muy pronto el país saldrá de esta tragedia.

Batalla y Juventud

La Batalla de La Victoria, librada por José Félix Ribas en el estado Aragua, fue lo que dio origen a la celebración del Día de la Juventud.

En el año 1814, como parte de la Guerra de la Independencia de Venezuela, fuerzas realistas al mando de Francisco Tomás Morales fueron vencidas por las tropas del general José Félix Ribas, conformadas mayoritariamente por jóvenes.

Eran jóvenes provenientes de la Universidad Real de Venezuela y del Seminario Santa Rosa de Lima, quienes se unieron a la lucha por la Independencia.

El Libertador Simón Bolívar al conocer sobre la victoria del general Ribas, lo tituló “Vencedor de los Tiranos”.

El 12 de febrero de 1947, la Asamblea Nacional Constituyente decretó la celebración de cada aniversario de la batalla como el Día de la Juventud, en honor a los jóvenes que lograron esta importante victoria para el país.




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