Matthew Heath, el ex infante de marina capturado en Venezuela en septiembre de 2020 bajo cargos de terrorismo, se negó esta semana a asistir a su juicio en protesta por sus condiciones de prisión.
Heath tenía previsto asistir a una audiencia para continuar con su caso el martes, pero se negó a asistir, frenando los esfuerzos del gobierno de Nicolás Maduro para procesarlo. Con acceso limitado a abogados y familiares, el estadounidense ha estado detenido casi en aislamiento y esta semana utilizó la poca influencia que tiene para tratar de forzar la mano de las autoridades.
“El que Matthew esté protestando de esta manera nos dice que está desesperado y que está preocupado por su propia seguridad”, dijo Trudy Rutherford, tía de Heath. “El juez aprobó la moción de Matthew para ser trasladado a una prisión más segura hace dos semanas y no ha sucedido. Esto dice algo sobre el respeto que sienten por el estado de derecho y por los derechos humanos”.
Un asesor de la familia de Heath agregó: “Esta es la única forma en que puede dar a conocer sus preocupaciones, negándose a acudir a la corte”.
La orden de traslado se emitió a finales del mes pasado y Heath, quien el 8 de julio cumplió dentro de la cárcel sus 40 años, debió haber sido trasladado a la prisión La Planta en Caracas, la capital del país. Esa instalación había sido cerrada anteriormente, pero fue reabierta recientemente para albergar a prisioneros no venezolanos.
La cárcel cercana al barrio El Paraíso es una instalación de mínima seguridad que permite a los reclusos tener más interacción con amigos, familiares y otros reclusos.
“Es una prisión donde tendría acceso al aire libre, a la luz del sol. Tendría acceso a un patio. Entonces tendría derecho a recibir la luz del sol ”, dijo Tamara Suju, abogada y activista de derechos humanos que forma parte del equipo de defensa de Heath. “Todo esto es muy diferente al lugar donde se encuentra detenido, que es un sótano de tercer nivel de un edificio convertido en prisión de máxima seguridad”.
Desde su captura el pasado 10 de septiembre, Heath ha estado detenido en el notorio cuartel de la DGCIM en Boleita, dirigido por la temida unidad de inteligencia militar del régimen. El edificio que lo sostiene está a tres niveles bajo tierra sin luz natural. Su equipo legal dijo que está detenido en una celda diminuta que mide solo dos metros por dos metros y está encerrado detrás de pesadas puertas de seguridad.
Además, actualmente hay solo unos pocos presos en la DGCIM, lo que hace que sus condiciones de aislamiento sean algo parecidas a las de Rudolph Hess, el infame nazi que durante 21 años fue el único prisionero de la prisión alemana de Spandau.
El nativo de Tennessee espera recibir un mejor trato en la nueva prisión, que está dirigida por guardias del Ministerio del Interior y Justicia en lugar de guardias de la DGCIM que son parte del aparato de inteligencia militar. En la nueva prisión, podría tener la oportunidad de interactuar con otros prisioneros nacidos en el extranjero, potencialmente otros estadounidenses.
The Miami Herald y el Nuevo Herald informaron exclusivamente el mes pasado que la familia de Heath cree que fue secuestrado o extorsionado a partir de marzo del 2020 hasta justo antes de su arresto por desconocidos en Colombia, donde había estado detenido brevemente por tener posesión de munición pero no un arma.
Información completa aquí El Nuevo Herald
