El presidente Horacio Cartes, quien pretende seducir al electorado con su delfín Santiago Peña, su apuesto exministro de Hacienda de 39 años y exfuncionario del FMI, exhortó a la unidad de los colorados ante el riesgo de perder el gobierno en 2018.
«Creo que es el momento propicio de abrir el corazón para quienes no pensamos lo mismo», dijo el jefe de Estado a sus adversarios internos, al acompañar personalmente a Peña a inscribirse este martes a la sede del partido. Cartes se postula a senador.
En prevención de un cisma en el partido de gobierno, el presidente se dirigió al grupo que lidera Mario Abdo Benítez, rival de Peña en las primarias del 17 de diciembre.
Benítez (44 años), expresidente del Senado en 2016, hijo de un conocido exsecretario privado del dictador Alfredo Stroessner (1954-1989), pretende captar a los descontentos del oficialismo.
Alianza opositora
Para los colorados, el escollo mayor se presentará en abril de 2018 cuando compitan por el poder contra una alianza opositora liderada por Efraín Alegre, y que integra a la izquierda del exobispo y expresidente Fernando Lugo (2008-2012) y del popular alcalde de Asunción, Mario Ferreiro.
Alegre, un abogado de 53 años, fue rival de Cartes en las presidenciales de 2013, en las que cayó derrotado por 8 puntos de diferencia.
La izquierda, dividida en luguistas y ferreiristas, eligió a Leonardo Rubín, un reconocido hombre de radio, de discurso conciliador y ambientalista, para acompañar a Alegre en la fórmula, con la misión de convencer al electorado joven, más reticente a concurrir a las urnas.
De esa forma, bajo el lema «Paraguay, más allá de los colores», la oposición evita la fuga de votos descontentos hacia una tercera fuerza independiente, lo que hubiera favorecido a los colorados.
«Peña y Benítez son verdes para gobernar el Paraguay», dijo a la AFP Mateo Balmelli, un influyente dirigente del partido Liberal quien se presentará en las primarias liberales.
A su turno, Efraín Alegre declaró en una entrevista con la AFP que «a Cartes lo vamos a sacar con votos el 22 de abril, como corresponde en democracia».
El candidato oficialista Peña «es el secretario de Cartes», ironizó Alegre y vaticinó en base a sus propias encuestas que «hay un 33% de afiliados colorados que no lo van a votar» en 2018.
Consultado sobre si tiene un pacto con los disidentes del oficialismo colorado, subrayó que «hay un entendimiento claro con ellos» para después de las primarias de diciembre.
El proyecto político opositor «va más allá de los colores y eso tendrá una incidencia importante en las elecciones del 2018», agregó.
