El exministro y economista Santiago Peña pidió este martes en su proclamación oficial como presidente electo de Paraguay que los distintos sectores dejen de lado las diferencias e invitó a todos los ciudadanos a trabajar, ya que tienen por delante «un país por reconstruir».
«Que este acto de proclama sea el inicio de un periodo donde dejamos de lado nuestras diferencias que son un lastre para el progreso y recuperemos los valores que dieron identidad a nuestro pueblo: la honestidad, la transparencia, la igualdad y la solidaridad», afirmó Peña en su discurso después de recibir de manos de los titulares del Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE) el certificado que lo acredita como presidente electo del país.
Según los cómputos finales, Peña, de la Asociación Nacional Republicana (ANR) o Partido Colorado, se impuso por 1.291.209 votos, seguido por los 830.302 votos del excandidato Efraín Alegre, de la Concertación Nacional para un Nuevo Paraguay, y los 692.429 votos del exaspirante independiente Paraguayo Cubas, del Partido Cruzada Nacional (PCN).
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Cubas permanece detenido desde el pasado 5 de mayo por perturbación a la paz pública y otros presuntos delitos tras las protestas protagonizadas por sus seguidores después de que denunciara un presunto fraude en los comicios.
Peña, quien acudió a la ceremonia de hoy acompañado por su esposa y futura primera dama, Leticia Ocampos, y del vicepresidente electo, Pedro Alliana, señaló que «con la cooperación generosa de todos los paraguayos» tienen «por delante un Estado que recuperar y un país por reconstruir».
«Los paraguayos no podemos esperar más tiempo para alcanzar una sociedad próspera y con justicia social», remató Peña, quien recibirá el poder el próximo 15 de agosto de manos del actual presidente, Mario Abdo Benítez, también del Partido Colorado.
El futuro gobernante consideró las elecciones libres y transparentes como la génesis en la construcción de una cultura «que facilite el acceso a una sociedad unida en su pluralidad» y un mecanismo que otorga la «necesaria autoridad para recibir el respaldo ciudadano», incluyendo el de aquellos sectores que creyeron en otras propuestas.
En ese sentido, celebró que entre los integrantes de las mesas de votación de la oposición «primaron la decencia y la hidalguía» y aceptaron «sin grandes reparos el escrutinio de la libre voluntad del pueblo paraguayo», lo que consideró una «señal inequívoca de una madurez cívica que alienta para diseñar un porvenir compartido».
También defendió la democracia como un «modelo de convivencia pacífica», como un «estilo de vida en el que las naturales diferencias humanas se resuelven en el ámbito civilizado del derecho» y una forma de Gobierno que garantiza que la oposición de idea, actitudes y conductas «se reglan y se canalizan por el trayecto de los debidos procesos institucionales y normativos».
«En el otro extremo, solo nos aguardan el caos, la anarquía, la violencia y la destrucción», apuntó Peña, para quien las elecciones del pasado 30 de abril constituyen la «demostración de que esta institución funciona y se consolida como una piedra angular» de la democracia paraguaya.
Por su parte, el presidente del TSJE, Jorge Bogarín, dio por concluido «un largo caminar» que el ente electoral inició a mediados de diciembre de 2021 y que aseguró estuvo marcado por el «estricto cumplimento del cronograma electoral».
«Hemos logrado transitar un difícil y largo camino, que con la utilización de las máquinas de votación, voto electrónico, escrutinio público y fiscalizado, han hecho realidad un proceso transparente», defendió Bogarín.
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Destacó igualmente que este país, «una vez más, atraviesa un momento histórico en su camino a la consolidación democrática» y subrayó que Paraguay «es y debe ser para siempre libre e independiente».
En los días posteriores a los comicios, Cubas y Alegre exigieron la apertura del llamado «cuarto sobre», que resguarda los boletines de voto usados el pasado 30 de abril, y una auditoría internacional.
El TSJE descartó un conteo manual de los sufragios y aclaró que la auditoría internacional tuvo lugar con anterioridad a las votaciones.
