Para el presidente del Colegio de Bioanalistas de Carabobo, César Sanchez, el hecho de que a estas alturas es que se venga a solicitar a los laboratorios privados que reporten los resultados de las pruebas COVID-19, es evidente de que se ha llevado un subregistro de los casos.
Sánchez declaró al programa En Contexto, de la emisora Exitos, donde manifestó que a pesar de que estamos a casi dos años de haberse decretado la pandemia, es ahora cuando se pide el registro de los resultados.
No obstante calificó como positiva la acción tomada por el gobierno.
Refirió que también se les está solicitando a los laboratorios una especie de segundo registro, donde deben especificar el tipo de pruebas que realizan y los reactivos que utilizan.
El experto precisó que la Contraloría Sanitaria envió toda la información referida a los registros, aunque a la fecha no se ha indicado la periodicidad con que los laboratorios deben enviar el inventario.
Comentó que aunque en Carabobo hay unos 300 laboratorios privados, por ahora la información de los registros se está aportando por correo electrónico. No descartó la posibilidad de que en el futuro se cree una plataforma para este asunto.
Asimismo señaló que si bien es cierto las pruebas de COVID-19 deberían hacerse en laboratorios público, es muy poco el número de personas que pueden acceder a este beneficio.
A su modo de ver, es evidente que los reactivos se destinan para el personal de salud y para los pacientes hospitalizados, y queda muy poco para el resto. Por eso se remiten los pacientes al área privada.
Y eso ocurre no solo con las pruebas de COVID-19, sino también con muchas otras.
