Inicia primera sesión plenaria con la delegación de Nicaragua, quien rechaza y condena la reunión por querer intervenir a Venezuela sin su aprobación, y en contra de las normas de la OEA, pide el cese de las presiones políticas para querer inducir un golpe de Estado, romper el equilibrio diplomático y las buenas relaciones que siempre han caracterizado a la organización. «Si realmente están interesados en ayudar a Venezuela respeten al país, a los venezolanos, la libertad y democracia».
Los cancilleres acuden divididos a su primera reunión sobre la situación venezolana. El grupo impulsor del encuentro -liderado por países como México, EE.UU., Perú y Canadá- promueve una declaración que pide a Maduro “el cese” de la Asamblea Constituyente “en la forma en que está concebida actualmente”, la liberación de los “presos políticos” y un calendario electoral con observación internacional.
Una segunda propuesta fue presentada por Antigua y Barbuda exhortando a que se cancele la convocatoria a la constituyente y se inicie un proceso de diálogo y negociación.
Los 14 países de la Comunidad del Caribe (Caricom) presentaron el martes un tercer proyecto que no incluye la mayoría de las demandas del texto del grupo de Perú, lo que ha desanimado a algunas delegaciones, indicaron a Efe fuentes diplomáticas.
En lo que sí coinciden los tres borradores es en pedir el cese de la violencia a todas las partes, un nuevo proceso de diálogo, la creación de un grupo que lo acompañe y en la invitación a Venezuela a reconsiderar su decisión de dejar la OEA.