El Gobierno de Siria negó hoy haber utilizado armas químicas durante un ataque en 2018 contra Saraqib, en la provincia noroccidental de Idlib, y calificó de «falsas» las conclusiones de la investigación de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) al respecto.
«El informe incluía conclusiones falsas e inventadas consideradas como otro escándalo de la OPAQ y sus equipos de investigación, que se suma al escándalo del informe falsificado de la Misión de Investigación sobre el incidente de Duma», aseveró el Ministerio de Exteriores en declaraciones recogidas por la agencia oficia siria SANA.
En marzo de 2019, la OPAQ confirmó el uso de gas «cloro» un año antes contra la población civil de Duma, en la periferia de Damasco, un ataque que desencadenó una ofensiva internacional contra posiciones gubernamentales sirias, si bien poco después se filtró un informe que ponía en duda las conclusiones de la organización.
El informe filtrado analizaba el origen de dos cilindros con cloro encontrados por la Misión de Investigación de la OPAQ en Duma y, en sus conclusiones, afirmaba que «no se puede decir con certeza que llegaron allí como resultado de resultar lanzados desde una aeronave», por lo que Rusia calificó el hallazgo de montaje.
Conclusiones razonables
El pasado lunes, la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas, que ha estado investigando una serie de ataques en el país árabe, publicó las conclusiones sobre otra acción, en este caso ocurrida en Saraqib el 4 de febrero de 2018, y consideró que «hay motivos razonables para creer» que también allí se utilizó armamento prohibido.
«Siria condena en los términos más enérgicos lo que se incluyó en el informe y rechaza lo que éste estipula en forma y contenido, y niega el uso de gases tóxicos en la localidad de Saraqib o en cualquier otra ciudad o localidad siria», concluyó hoy el Ministerio de Exteriores, de acuerdo con SANA.
El anuncio el lunes por parte de la OPAQ sobre el caso de Saraqib provocó la condena de la Unión Europea a la utilización de este armamento contra la población civil, mientras que el secretario general de la ONU, António Guterres, exigió que los responsables del ataque rindan cuentas por lo sucedido. EFE
