Este enero se cumple un año desde que la Fundación Tierra Blanca realizó su primer abordaje en comunidades indígenas del estado Bolívar. En aquella oportunidad su equipo de voluntarios, constituido por estudiantes y profesionales de bioanálisis y medicina, se percató que son muchas las necesidades sanitarias que tienen los ciudadanos originarios de la zona y están preparados para extender su labor humanitaria.
El próximo 3 de enero partirá un grupo de 40 voluntarios coordinado por Jhon Jesus, Hanne Campbell, Patricia Méndez y Esleiker Amaya, quienes, junto profesionales y estudiantes de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Carabobo, realizarán consultas médicas, recibirán muestras para estudios coproparasitológicos y de malaria, así como también suministraráan insumos farmacéuticos en comunidades aledañas al río Parguaza, en el municipio Manuel Cedeño del estado Bolívar.
Planean visitar 7 comunidades piaroas (con un total de 1500 habitantes), desde dos puntos de control en la comunidad Tierra Blanca, que le da origen al nombre de la Fundación, y la comunidad Caño Pendare. El equipo además emprenderá jornadas de capacitación en el diagnóstico de parasitosis intestinales dirigidas a los microscopistas encargados del diagnóstico de malaria en la zona.
Ser parte del voluntariado, según Jhon Jesus, presidente de la fundación, es una experiencia de trabajo continuo. “El voluntario ya tiene un cronograma de actividades preestablecido, todos se despiertan temprano (6:00 a.m.), para arreglarse y vestirse lo más rápido posible y así brindar servicios básicos en el área de salud, como lo es la recepción de muestras para estudios coproparasitológicos y pacientes con clínica de malaria”.
La labor diaria tiene hora de inicio, pero no de culminación, señala el licenciado, pues eso dependerá de la cantidad de muestras que lleguen por día. Recuerda que en una ocasión terminaron de realizar diagnósticos en el área de coproparasitología a las 2:00 a.m.
Mientras unos se dedican al área técnica otros voluntarios se encargan de labores formativas comunitarias; hacen censos y dan charlas casa por casa sobre la prevención de enfermedades frecuentes en las localidades de etnia piaroa.
Dicho abordaje es promovido por el Departamento de Parasitología de la Escuela de Ciencias Biomédicas y Tecnológicas de la Facultad de Ciencias de Salud de la Universidad de Carabobo, que ha entrenado a sus estudiantes de bioanálisis, a través de sus docentes y asistentes de laboratorio.
Jesus destacó que para esta ocasión el acompañamiento humanitario llevará el nombre del Dr. Renzo Nino Incani, con el propósito de rendir tributo al trabajo educativo que ha realizado el docente al frente del departamento de parasitología de la institución durante más de 40 años.
“Ser parte del voluntariado se trata de vivir una experiencia para aventureros, la cual no genera ningún tipo de lucros y reconocimientos, pero si te genera un alto grado de satisfacción personal”, destacó el coordinador principal de la Fundación. “Saber que aportaste y dejaste a una persona más sana, siendo esta zona un lugar de difícil acceso, lo cual es algo que condiciona que nuestros hermanos indígenas reciban el derecho a la salud”.
La directora de Comunicación e Información de Tierra Blanca, Zayra Monsalve, indicó además que la visión que tiene la fundación es poder capacitar a comunidades susceptibles para que así puedan responder a sus propias necesidades en el área de salud. Para hacer eso posible la organización está abierta para recibir contribuciones y más voluntarios a su causa. Los interesados en prestar cualquier tipo de colaboración pueden hacer seguimiento a las actividades mediante la cuenta de Instagram @fundaciontierrablanca, a la de Twitter @fundatierrab y la página de Facebook Fundación Tierra Blanca. Asimismo se pueden comunicar a través del correo fundaciontierrab@gmail.com y a los números 0412-7778111 y 0412-8811153.
