En el cierre están incluidos tres compositores. (Foto Crédito)
Para el maestro Gregory Carreño el concierto que dirigirá este domingo, 30 de noviembre, a las 11:00 am, en la Sala Simón Bolívar, del Centro Nacional de Acción Social por la Música, será especial. No solo porque se reunirá de nuevo con la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar de Venezuela, sino porque dirigirá a los también maestros fundadores de El Sistema Frank Di Polo (viola) y Valdemar Rodríguez (clarinete) en la interpretación del Doble Concierto para clarinete y viola en Mi Menor Op. 88, de Max Bruch.
“Para mí, dirigir a la Simón Bolívar siempre es un compromiso; ellos son nuestros representantes fieles e idóneos del país en el mundo. Y si le sumas que los solistas del concierto serán Frank Di Polo y Valdemar Rodríguez, el concierto será muy especial para mí. Frank fue el primer concertino de todo este movimiento, y como solista de viola, con una estirpe de primera, se consagra como un gran músico. Mientras que Valdemar, que formó parte de la generación que vino después, es un gran solista de clarinete, un gran maestro y un líder entre nosotros. Sé que será un buen concierto”, cuenta el maestro Gregory Carreño quien como clarinetista integró, junto a Frank Di Polo la primera orquesta de El Sistema.
Pero hay más. No solo conducirá a la Simón Bolívar y a los maestro Di Polo y Rodríguez, sino que también el maestro Gregory Carreño dirigirá la Obertura de la Ópera Los maestros cantores de Núremberg en Do Mayor, de Richard Wagner, una de las primeras obras que interpretó la Orquesta Nacional Juvenil de Venezuela, bajo la batuta del maestro José Antonio Abreu.
“Se trata de una obertura sumamente grande; de una de las óperas de Wagner que tiene una connotación musical enorme, y con gran fluidez lírica. Frank, como concertino, y yo, como clarinetista, fuimos parte de la orquesta en esa primera interpretación. Tenía pendiente volver a interpretarla, y hacerla en este concierto, que es un preámbulo a lo que será la celebración de nuestro aniversario número 40, significa mucho para mí”, dice, lleno de nostalgia, el maestro Carreño, quien se ha destacado por difundir el trabajo coral y orquesta de El Sistema.
La obra que cierre este concierto, en el que están incluidos tres compositores del período romántico, será con la Sinfonía N° 2 en Re Mayor Op. 73, de Johannes Brahms. Piezas, que según el maestro Carreño, representa y constituye el aporte que el compositor alemán legó a la Historia de la Música.
“Con esto no digo que su primera sinfonía no haya sido importante. Pero Brahms tenía miedo. Sentía que ya todo lo que se podía escribir en una sinfonía lo había hecho Beethoven. Así que con este fantasma, Brahms tarda 40 años en escribir su primera sinfonía, que cuando se presentó fue calificada por la crítica y el público como la décima sinfonía de Beethoven. Luego, consigue crear su segunda sinfonía en tan solo dos meses: ahí está su “yo” verdadero y sublime; con un lenguaje nuevo dentro de la Historia de la Música; con su grandes líneas inmensas desbordadas de un calor enorme extraromántico. Esta obra fue revisada por la esposa de su protector Robert Schumann, Clara, con quien tendría una romance epistolar intenso”, narra Carreño.
El concierto en el que participarán los maestro Frank Di Polo y Valdemar Rodríguez, bajo la dirección de Gregory Carreño, forma parte de la programación de esta semana del Centro Nacional de Acción Social por la Música, sede del Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela, cuyo ente rector es la Fundación Musical Simón Bolívar.
