Luisa Quintero
Los casos de descomposición de alimentos parecen no acabarse. Más de 80 kilos de pollo, con el que pretendían alimentar a los pacientes de la Ciudad Hospitalaria Dr. Enrique Tejera, se dañaron en las cocinas del centro de salud, denunció Carlos Viloria, presidente del Sindicato de la Salud del estado Carabobo.
El pollo descompuesto quería ser utilizado para alimentar a los pacientes que se mantienen recluidos en las distintas áreas de la CHET, precisó Viloria. Los trabajadores y varios representantes sindicales reclamaron por esta situación, por lo que se suspendió la orden de usar los alimentos dañados.
El estado de las cocinas tampoco es el adecuado para la fabricación de alimentos a pacientes con distintas necesidades dietéticas, indicó el sindicalista. En diversas oportunidades se ha denunciado al presidente de Insalud, Raúl Falcón, sobre el estado de las aguas servidas cercanas a las cocinas, el estado de los utensilios (ollas, calderos). Hasta los momentos no han sido escuchados.
Viloria recordó que los pacientes son alimentados con cualquier producto, a pesar de que algunos presentan restricciones indicadas por sus médicos tratantes. Además, cuando la comida escasea, son los familiares de los pacientes los que deben suministrarla. Los alimentos que son enviados a la CHET, pertenecen a un convenio entre el Ministerio de Salud y las corporaciones CASA y Pdval.
Es necesario que el Consejo Legislativo realice una interpelación al presidente de Insalud, para que justifique el estado de la CHET y los ambulatorios, solicitó Viloria. A pesar de que han invertido recursos para la remodelación de varias áreas, los resultados son presentados cuando viene el gobernador Francisco Ameliach, y los pacientes no disfrutan de ello.
Se intentó contactar por vía telefónica con el presidente de Insalud para conocer su posición sobre esta situación pero no fue posible.