A pesar de las limpiezas realizadas por los organismos competentes, el problema regresa con más fuerza
Sara Pacheco
Desbordamientos de aguas servidas que caen en la calle norte 1, entre la cuarta y quinta transversal, de la zona industrial Carabobo, han generado varios huecos en la vía. El líquido empozado, debido a la obstrucción de los desagües cercanos, empeora el problema, generando en ocasiones lagunas verdes que imposibilitan el paso regular de peatones e incluso motorizados.
La zona es muy transitada a diario pues cerca hay distintos comercios, así que el movimiento solo cesa cuando llega la noche a la ciudad. Yenny Pereira labora en el sitio. Comentó que el problema data de casi un año. “De tanto estancamiento se formó un hueco en medio de la vía”. Arrugando el rostro aseguró que el principal problema es el fuerte olor que arroja, el cual viene acompañado por moscas.
Personal de Hidrocentro habría limpiado las alcantarillas cercanas por el problema descrito. Sin embargo, volvió, esta vez peor, pues el agua no puede fluir. Tierra, piedras y desechos obstruyen los espacios destinados para el despeje del líquido de las calles.
Si eso lo destapan y le hacen un buen trabajo el agua se va y no se queda en la zona, destacó Yenny. Hace unos días un cliente ingresó al establecimiento donde la chica trabaja. Estaba mojado hasta las rodillas del agua sucia que permanece en la calle y esconde tanto las aceras como los huecos. Estos se tornan invisibles lo que origina accidentes.
Algunos han optado por buscar presupuestos para la reparación. La división de gastos entre comercios sería una opción válida ante la falta de atención por parte de los entes competentes. Además de remediar el molesto olor que se mezcla en el aire, evitarían un mayor accidente, pues como describió Yenny, al llegar las precipitaciones todo el sector se inunda, generando una capa que cubre cualquier irregularidad en el camino.