Ante la falta de medicamentos, en Venezuela más de 300 mil personas que padecen enfermedades reumáticas y autoinmune, sufren serias complicaciones y deformaciones que implican incapacidad física y emocional, en detrimento de su calidad de vida. Es una condición que ha incrementado el riesgo de muerte en lo pacientes en 2,7%.
Existen enfermedades crónicas que pueden, en algunos casos, representar un compromiso articular o limitar el buen funcionamiento de órganos vitales, si la persona no lleva un tratamiento adecuado, explicó Verónica Crespo, médico reumatólogo y representante de la Sociedad Venezolana de Reumatología, vía telefónica con la periodista Ana Isabel Laguna en su programa Por tu Salud, transmitido por El Carabobeño Radio
En el caso de la artritis reumatoidea, una de las más frecuentes, se presenta un importante compromiso en las coyunturas o articulaciones, si el paciente no cumple con su tratamiento para el dolor y controlar la enfermedad. Los especialistas les recetan la denominada droga modificadora, utilizada para frenar el progreso de la patología.
En 2.7% se incrementa el riesgo de mortalidad en pacientes que mantienen activa la enfermedad por falta de tratamiento. Una de las complicaciones que han comenzado a presentar varios pacientes es el Lupus Eritematosos Sistémico, debido a la falta de Plaquinol, medicamento que está en la lista de drogas modificadoras de la enfermedad, y el cual estaba disponible en el país hace dos años atrás, pero ya no se encuentra. Bajo ese escenario, las personas presenta complicaciones renales, neurológicas, cardiovasculares, entre otras.
Al inventario de la escasez se suman los medicamentos para la tensión, la diabetes, la tiroides, para proteger los riñones, ya que las complicaciones pueden ser de cualquier área del cuerpo.
Y si sucede que aún con esa droga modificación de la enfermedad y esteroides a bajas dosis el paciente sigue con dolor e inflamación, se deben agregar las llamadas terapias biológicas. Aunque esas también están desaparecidas.
Cuando se habla del sistema inmunológico, cada paciente es distinto. Pero existe un algoritmo que lo tiene el Seguro Social y las autoridades de salud, y son las razones por las que se va cambiando en el tiempo, porque es muy importante un diagnóstico oportuno para ordenar un tratamiento precoz de la enfermedad.
No tener tratamiento o suspenderlo porque no se consigue, tomarlo de manera irregular o bajar la dosis, muchas veces hace que el paciente entre en actividad de la enfermedad con dolor, inflamación, causando daño y destrucción articular, que a veces son irreversibles, lo que al mismo tiempo puede llevar al paciente a una incapacidad laboral, entre otras consecuencias, tanto para él o ella, para su familia.