El individuo deprimido es incapaz de estar a la altura; está cansado de tener que convertirse en él mismo.”

Byung Chul Han

El bolívar como institución social ha perdido no solamente todas las cualidades que lo convierten en moneda, aunque de manera torpe la cualidad de medio de pago se logró mantener aplicando un impuesto torpe en sus transacciones, como lo es el impuesto a grandes transacciones financieras, mismo que es incapaz de revertir la repudiabilidad hacia una moneda que sencillamente es tóxica y que en virtud a las inmuebles devaluaciones y a su pertinaz pérdida de poder de compra, ha sido absolutamente desplazada por el dólar como consecuencia de que el país vivió cuarenta y nueve meses de hiperinflación, manteniéndose las causas bases indemnes cifradas en la emisión irresponsable de bolívares y en el financiamiento al gasto público.

El mes de noviembre, revivió los fantasmas del agosto negro o mejor del agosto error, el pago fraccionado a los 5.5 millones de funcionarios públicos ya a proveedores en bolívares en un entorno de déficit de oferta de divisas y aumento de demanda de las mismas, llevaron a que las brechas entre los dos esquemas cambiarios se ubicasen en 30%, sin embargo el esquema oficial muestra una conducta alcista, la cual podría calificarse como criminal usando la lógica del régimen.

A la fecha de publicación de este articulo el tipo de cambio oficial publicado por el emisor es de 15.7668 Bs/USD y el paralelo se ubica en 17,14 Bs/USD, generando un acercamiento, pero al alza entre los dos tipos de cambio. Quizás el ruido cognitivo causado por las festividades decembrinas, el mundial y la recurrente supervivencia, no nos han permitido advertir de un giro en la conducta comercial o del intercambio microeconómico, en el escombro que hay en nuestros mercados y es que cada vez es más común que sea imposible deshacernos de los bolívares por repudiables y tóxicos, exigiendo que el pago se realice en divisas e incluso las extinciones de los pasivos o exigibilidad de los activos se hagan en bolívares incurriendo en la desesperación de salir de esta unidad monetaria, bien sea en el mercado desregulado de divisas o en la compra de bienes durables, en los cuales cada vez menos son aceptados los bolívares, este es un escenario horripilante de coexistencia monetaria y repudio de una moneda, un atavismo escolástico tomado de las obras de Nicolás de Oresme, una reedición feudal del intercambio, el mayor de los primitivismos.

Por otra parte en términos de salarios y pensiones las mismas desaparecieron, su aumento en abril, cuando se acuñó la frase charlatana de “ Venezuela se arregló” pasaron de 30USD por mes a 8.24 USD por mes al esquema oficial y a 7,6 USD mensual, ambos montos criminalmente bajos, para una población vulnerable sumida en 81% de pobreza multifactorial, como multifactorial por compleja es nuestra crisis que deviene pobreza de índole cognitiva, hipnosis colectica y semiología absurda.

En términos inflacionarios somos los campeones, seguidos de la mundialista Argentina, quien se aproxima a 100 puntos de inflación, nosotros bien podemos cerrara el año entre 200 y 170%, y volver al camino de la hiperinflación, la antigualla que no superamos tras ningún programa sino como consecuencia de la miniaturización de la economía, así que esa amenaza subyace, cual cuervo sobre el busto de Palas, si se sigue emitiendo dinero de manera irresponsable y además incurriendo en extravíos deficitarios, se puede ser defenestrado a la temida hiperinflación pues la misma, es positivamente correlativa al aumento de la liquidez monetaria e inversamente correlativa al peso del déficit público sobre el PIB, por cierto aun no sabemos cual es el presupuesto para el 2023 y menos tenemos las cifras de PIB, Balanza de pagos y fuentes de endeudamiento, sin embargo cual Calígula Nicolás Maduro, nos promete en su lenguaje cuartelero hacerle frente al dólar criminal, en el frente de la guerra económica, la cual henos perdido y de manera humillante.

Finalmente debemos revisar que son tales las dimensiones de nuestras distorsiones económicas, que el concepto de la inflación en dólares debe ser revisado, pues si existe una evidente pérdida de poder de compra de este activo de reserva, la moneda es segura y un refugio de valor pero las hostilidades son tales que su capacidad de cobertura es mínima, así mismo podríamos usar doblones en oro y los mismos perderían valor en una economía en la cual el criterio de estabilidad no existe y peor aún en la cual la entropía es la norma.

El año que viene, que empieza en semanas traerá la ritornata de los controles, la repudiabilidad masiva del bolívar y la desigualdad, las externalidades positivas de la licencia 14, que permite a CHEVRON, actuar como un monopsonio ( mercado con un único comprador), no serán suficientes para revertir los daños, sin la licencia la recuperación acotada de la economía no superaría el 3%, con el concurso de CHEVRON la recuperación se ubicaría en 4%, siendo solo imputable a comercio y servicios y no permeando hacia manufactura e industria, no hay recuperación y así lo demuestra la horrida conducta cambiaria, un régimen que destruyó la moneda es incapaz de conseguir recuperación.

El ser humano depresivo es un animal laborans que se explota a sí mismo, y lo hace voluntariamente, sin restricciones externas.”

Byung Chul Han




Estimado lector: El Diario El Carabobeño es defensor de los valores democráticos y de la comunicación libre y plural, por lo que los invitamos a emitir sus comentarios con respeto. No está permitida la publicación de mensajes violentos, ofensivos, difamatorios o que infrinjan lo estipulado en el artículo 27 de la Ley de Responsabilidad en Radio, TV y Medios Electrónicos. Nos reservamos el derecho a eliminar los mensajes que incumplan esta normativa y serán suprimidos del portal los contenidos que violen la Constitución y las leyes.