Unidades de traslado desde septiembre están fuera de servicio por fallas mecánicas
Angélica Medina una joven madre residenciada en el barrio Alí Primera de Tucacas nunca imaginó que las labores de parto de su primer hijo, el pasado miércoles 15 de octubre, involucrarían también un traslado en autobús hacia otro centro asistencial en el vecino municipio carabobeño Juan José Mora.
La indisponibilidad de una ambulancia y el cese de las operaciones en la sala de partos del Hospital Dr. Lino Arévalo, desde hace meses, obligan a cientos de pacientes como esta joven madre a buscar alternativas para recibir atención médica o en su defecto un traslado supervisado hacia un centro asistencial en Coro o la entidad carabobeña.
En todo el eje costero falconiano solo existen dos ambulancias con las que cuenta el Hospital Lino Arévalo que es además referencia para la atención médica de lugareños y turistas en cinco municipios. Unidades que desde septiembre se encuentran fuera de servicio, debido al deterioro mecánico en el que se encuentran.
Familiares de pacientes afectados, como Angélica Medina, mencionaron que a las dos unidades se les han realizado reparaciones, pero solo bastan dos viajes de emergencia hacia la ciudad de Coro para que se vuelvan a dañar.
Los planes de Angélica eran dar a luz a su primer hijo en Tucacas. Para su sorpresa se vio obligada a montarse en un autobús con destino a Puerto Cabello. Pero el pequeño en camino decidió que sería el ambulatorio de Morón el escenario escogido para el llegar. Por suerte se trató de un parto normal sin contratiempos o emergencias médicas que requiriera de cuidados más avanzados.
Pero no siempre es así. Porque la mayoría de quienes acuden a estos centros hospitalarios no cuentan con los recursos para pagar servicios privados y solicitar apoyo a los entes de seguridad requiere de un valioso tiempo del cual, en el 80 % de los casos, debido a la emergencia médica no se dispone.
Comunidad, vocería comunal y pacientes exigieron a las autoridades competentes que doten de ambulancias nuevas al Lino Arévalo, con la tecnología requerida para la atención de pacientes en coma.
