Alfredo J. Rojas
@alfredorojasq
“Este es el año de los Cachorros” decían muchos en las Grandes Ligas, e incluso, hasta la famosa película “Volver al Futuro” así lo predijo hace 26 años atrás, pero no, lo cierto es que “La Maldición de la Cabra” sigue rondando en el estadio Wrigley Field, de Chicago.
70 años atrás, el 6 de octubre 1945, los Cachorros disputaban la Serie Mundial ante los Tigres de Detroit. En aquella oportunidad, la novena dominaba 2-1 a sus rivales en la ronda final. Fue así como Billy Sianis, de descendencia griega, decidió acercarse al Wrigley Field para disfrutar del cuarto encuentro, pero lo hizo acompañado de su peculiar mascota, una cabra llamada Murphy.
Al momento de ingresar al recinto deportivo, a Sianis se le prohibió entrar con el animal. En su enojo, el aficionado solicitó hablar directamente con el dueño del equipo, Philip K. Wrigley, quien mantuvo la decisión y no dejó pasar a la cabra.
“Perderán esta Serie Mundial y nunca volverán a ganar otra hasta que no se le permita la entrada a la cabra al Wrigley Field”, maldijo Sianis a las afuera del estadio. Los Cachorros perderían ese juego 4-1 y posteriormente el título de las Grandes Ligas. Desde entonces, la organización no ha vuelto a disputar un “Clásico de octubre”.
Serie Mundial esquiva
El club no se ha rendido en su afán por volver a disputar una serie final en el mejor béisbol del mundo, pero sin resultados positivos. En 1984, casi 40 años después de la maldición, los Cachorros regresaron a la postemporada. Se midieron ante los Padres de San Diego en la Serie de Campeonato de la Liga Nacional, la cual perderían tres juegos a dos.
En 1989 cayeron ante los Gigantes de San Francisco (4-1). En 1998 fueron barridos por los Bravos de Atlanta en la Serie Divisional. En 2003 el aficionado, Steve Bartman, privó al equipo del sueño y estos cedieron ante los Marlins de Miami. Fueron barridos en 2007 y 2008 en la Serie Divisional por los Diamondbacks de Arizona y los Dodgers de Los Ángeles, respectivamente.
Ahora en 2015, sufrieron cuatro derrotas consecutivas ante los Mets en la Serie de Campeonato de la Liga Nacional. Casualidad o no, su verdugo, en esta ocasión, tiene el mismo nombre de la cabra. Daniel Murphy trituró al pitcheo con cuatro vuelacercas, seis remolcadas y un promedio de .529.
