Aumenta la protección del niño. (Foto Archivo/El Carabobeño)
Luisa Quintero
El simple acto de alimentar a un bebé antes de cumplirse las primeras seis horas de vida, contribuye a la salud tanto del niño como la madre durante toda su infancia. Con hábitos adecuados, la lactancia materna de forma continuada hasta los dos años es una estrategia exitosa que proporciona energía y nutrientes lo que previene el hambre y la desnutrición, aseguró Milagros Varón, coordinadora de la Unidad Regional de Capacitación en Lactancia Materna (Unircalama/UC).
Alrededor del 60% de las muertes ocurridas antes de los cinco años se deben a desnutrición. Mediante un estudio realizado por Naciones Unidas y la Alianza Mundial pro Lactancia Materna se constató que mediante las mejoras de esta práctica se puede reducir la mortalidad neonatal e infantil en un 13%. Si se une a ello la alimentación complementaria se aumenta la cifra a 19%.
En los últimos años ha aumentado en un 29% la cantidad de madres que usan el pecho como alimentación primaria de sus niños en la región, indicó Varón. Aún así es necesario que las mujeres de todas las comunidades conozcan las técnicas adecuadas para amamantar, dado que muchas veces se incurren en errores que producen desespero.