El el cabildo abierto realizado este martes el alcalde de Valencia Miguel Cocchiola, resaltó que «No es posible una Asamblea Nacional Constituyente sin consultar al pueblo venezolano, pues en él reside la soberanía, el poder originario»
El cabildo fue realizado en la Plaza Fabián de Jesús Díaz, donde fue discutido el llamado a la modificación de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.
Ciudadanos, profesores universitarios, juristas, y especialistas en derecho constituyente, realizaron ponencias en las que explicaron los distintos mecanismos que tiene la Constitución venezolana para su modificación.
En el encuentro el alcalde Cocchiola, estuvo acompañado del vicerrector de la Universidad de Carabobo, Ulises Rojas, los juristas y constitucionalistas Edgar Núñez Alcántara, Iván Pérez Rueda, Yelitza Barreto y Gustavo Sosa.
También estuvieron el ex alcalde de San Diego, Enzo Scarano, el doctor Paúl Escovar y los concejales Manuel Molina y David Araujo, entre otras personalidades y miembros de la sociedad civil.
Está iniciativa del alcalde Miguel Cocchiola fue aplaudida por todos los presentes, quienes tuvieron la oportunidad de nutrirse de información de manos de especialistas, que con detenimiento fueron explicando las desventajas que traería al país la aplicación de dicho documento.
Finalizado el Cabildo, Edgar Núñez, secretario designado, hizo lectura al Manifiesto, el cual expresa entre otras cosas, que Venezuela no necesita una nueva Constitución en el 2017, sino respetar y cumplir la que está vigente. Existen prioridades humanitarias para la mayoría del pueblo venezolano como lo es el desabastecimiento, la inflación, la inseguridad y la violencia política: estas variables deben marcar la agenda del debate político actual, refirió.
Núñez detalló que el proceso constituyente iniciado por el Presidente de la República en Consejo de Ministros sólo puede ser válido luego de ser consultado en referendo popular, en elección libre, universal y secreta para todos los venezolanos.
De igual manera, acordaron no participar en la iniciativa constituyente sectorial y territorial, ya que rompe con la idea de una Democracia, donde todos los ciudadanos son libres, iguales y solidarios entre sí. “Creemos en la Democracia como forma de vida; en la libertad para tomar nuestras decisiones, en nuestra igualdad como seres humanos e hijos del mismo Dios, y en la solidaridad que nos une como un solo pueblo, sensible, imaginativo y poderosamente auténtico. La dignidad humana debe ser el rumbo de nuestro futuro como sociedad”, contempla el Manifiesto.
Por último, exigieron a la dirigencia política democrática, organizar y mantener la lucha pacífica, no violenta y con un profundo contenido libertario, en la búsqueda del bienestar de Valencia, de Carabobo y de Venezuela.
