Pleuritis, fibromatosis y hasta cáncer de pulmón son algunas de las enfermedades a las que está expuesta a largo plazo, una persona que cotidianamente cocine sus alimentos con leña.
Por lo menos así lo advierte la inmunóloga Kenelma López, quien dijo estar consciente que por la situación que se vive en el país, muchas familias no tienen otra opción que cocinar bajo esta metodología.
En conversaciones con el periodista Ricardo Graffe en la emisora Unión Radio, la especialista recordó que quien utiliza la leña para cocinar, es porque no tiene acceso al gas, y es una situación que se repite en buena parte del país.
López detalló que el humo proveniente de la leña, está hecho de una mezcla compleja de muchos gases y partículas finas, que contiene muchísimos contaminantes tóxicos.
La médico explicó que todas esas mínimas partículas microscópicas, entran por los ojos y de allí pasan al aparato respiratorio. Son ellas las que pueden desencadenar crisis de asma y afecciones respiratorias.
La experta manifestó que uno de los primeros síntomas que presenta una persona afectada por el humo de leña, es una tos seca que se incrementa con el tiempo. En el caso de los pacientes con alguna patología cardiovascular o respiratoria, esta tos se le agudiza y presenta más afección que otro que no tenga otra enfermedad de base.
Insistió en que la persona que cocine con leña tiene mayor predisposición a que cualquier agente respiratorio se aloje en su organismo y se pueda enfermar.
López sugiere a quienes se ven en la necesidad de cocinar con leña, que el fogón lo maneje una persona sana, con su tapabocas. Todos deben procurar mantenerse alejados del humo para evitar afecciones respiratorias.
