En la homilía ofrecida por la conmemoración de la entrada de Jesús en Jerusalén, el arzobispo de Valencia, monseñor Reinaldo Del Prette invitó a los católicos a dejar a un lado la indiferencia que a su juicio predomina en estos tiempos de crisis en el país.
Del Prette, comparó la odisea que transitó Jesús con la que viven los venezolanos. “En la Venezuela de hoy día, vemos cada vez más gente crucificada, personas que no tienen que comer, que sufren y padecen diariamente como lo hizo Dios” aseguró.
La primera autoridad religiosa de la ciudad recordó a los creyentes la importancia de la fe ya que considera que todas las verdades conducen a Cristo, quien dio su vida por la salvación de la humanidad.
FE
La iglesia se encontraba abarrotada de una multitud que oraba fervientemente por la libertad y la paz de Venezuela.
María Castillo, una de las devotas presentes en la celebración del domingo de ramos, aseveró que en su familia es una tradición asistir a la Catedral de Valencia para pedir por sus seres queridos y por el país debido a que asegura que “Venezuela es territorio de Dios”
Castillo, enfatizó que el señor no ignora las suplicas de los enfermos que no encuentran medicinas, de los hurgan de la basura para poder comer algo y de esas madres cuyos hijos han sido asesinados en manos del hampa.
Eusebio Aguilar de 84 años de edad, asistió el día de hoy a la misa de pasión por la creencia que le fue inculcada desde pequeño.
Cuenta que fue monaguillo y se vio tentado por el llamado al sacerdocio, pero al conocer a su amada esposa Josefina, todo cambió y su compromiso con Dios se transformó.
El octogenario afirmó emocionado que rogó por un país diferente, en donde impere el respeto y la unión, valores que considera se han perdido a los largo de los años. “Yo viví una Venezuela en la cual todos éramos como hermanos, en estos tiempos pareciera que no importa el dolor del prójimo” destacó.
