Dayrí Blanco | @DayriBlanco07
Olga Elena de González caminó repitiendo consignas sin dejar de sostener su rosario tricolor. Hizo el recorrido por el que pasó su esposo tras el volante minutos antes de ser asesinado por funcionarios policiales. Al llegar al sitio donde cayó su cuerpo lloró. No pudo evitarlo. Escuchó unas motos acercarse, se secó las lágrimas y su cara cambió. Se notaba molesta. “Todos los policías involucrados en la muerte de Leo deben estar en la cárcel”, sentenció.
Fuerte, como el primer día se le vio a la viuda. Estuvo presente en la protesta que realizaron amigos, vecinos y familiares de su esposo la mañana de este miércoles. Se concentraron desde las 7:00 a.m. en la avenida Valencia, justo donde comenzaron a perseguir a Leonardo González los uniformados. “Justicia para Leo”, se escuchaba de forma insistente entre la notas del Himno Nacional que cantaron en varias oportunidades.
Al finalizar el rosario, Olga Elena fue tajante: “no voy a descansar, entregaré mi vida si es necesario hasta que todas las personas que estuvieron involucrados paguen con cárcel”. Ronald Vidal Paternino es el único funcionario preso por el asesinato. Su viuda está convencida que son muchos más los uniformados los que deben estar tras las rejas. Desde quien dio la orden, hasta todos los que actuaron en la represión y persecución que le quitó la vida a ese venezolano que acompañaba a sus vecinos en una de las barricadas de Naguanagua durante la segunda jornada del pro cívico de 48 horas.
Fueron más de nueve los impactos de bala que se contaron en el vehículo de la víctima, quien intentó huir de la arremetida de una comisión conjunta de la policía estadal y la municipal. “Yo vi cuando pasaron los funcionarios porque vivo muy cerca de donde mataron a mi esposo, los dos cuerpos de seguridad, de manera desmedida actuaron porque son colectivos armados con placa, con licencia para matar. Un policía preparado con la instrucción adecuada no actúa como lo hicieron esos malandros armados”.
De González aseguró que Paternino, el funcionario de la Policía de Naguanagua privado de libertad, se encuentra solo en un calabozo y con acceso a un teléfono celular y redes sociales. “Está premiado. Y eso no debe ser. Él le disparó a mi esposo por la espalda y me rehuso a que esté como si nada ha pasado”. Ella desconoce detalles exactos del procedimiento legal. No sabe si la audiencia de presentación de imputado ya se realizó. “He estado abocada a actividades de tipo espiritual para mitigar este dolor que tengo, para llenarme de espiritualidad y no de odio porque no es lo que busco”.
Durante el sentido homenaje que le realizaron sus allegados la mañana de este miércoles, María Eugenia González, hermana mayor de Leonardo, recordó que se trataba de un hombre dedicado a su familia y el bienestar de los demás. “Él disfrutaba ayudar al prójimo, era su ley de vida”. Ella también exige justicia: “Todos tienen que pagar”.