El presidente de la Asamblea Nacional, Julio Borges, Henrique Capriles y varios diputados fueron alcanzados por gases lacrimógenos que dispersó la policía durante una protesta opositora en Caracas.
La nube envolvió a Henry Ramos Allup, que debió correr para resguardarse y terminó con los ojos irritados.
Así se irrespeta la investidura parlamentaria: diputados agredidos en la avenida Libertador al dirigirnos a sesionar, denunció Borges en Twitter.
Lilian Tintori, esposa del encarcelado opositor Leopoldo López, también aseguró haber sido afectada.Nos echaron gas, bombas, eso parecía una guerra. Venezuela está en dictadura, pero la vamos a liberar, dijo a periodistas en una autopista que conduce al hemiciclo.
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Las bombas fueron activadas cuando un millar de opositores intentaban marchar hacia la sede de la Asamblea para exigir al gobierno que respete la independencia del Legislativo.
Tras varios forcejeos, los manifestantes desistieron de avanzar y se dispersaron, aunque algunos legisladores comenzaban a ingresar individualmente a la cámara.
La policía evitó el avance de la multitud hacia ese punto de la capital donde partidarios chavistas marchaban.
«Siento como taquicardia, fueron muchas bombas», denunció Richard Blanco, desde una clínica a la que fue trasladado tras el incidente.
Primero Justicia culpó del ataque a «colectivos», grupos afines al gobierno a los que la oposición acusa de estar armados
