El presidente de la Ong, Primero Rafael Urdaneta, William Martínez, solicita al presidente Maduro que revise su decisión de vacunar a los niños entre tres y 18 años, por cuanto considera que se debe tomar en cuenta las advertencias que sobre el particular hacen los organismos internacionales especializados.
Cita que el Grupo de Expertos en Asesoramiento Estratégico (SAGE) de la Organización Mundial de la Salud (OMS) solo ha aprobado, hasta el momento, la vacuna de Pfizer/BioNTech como apropiada para personas de 12 años en adelante. Para menores de edad aún no hay vacunas contra la COVID-19 autorizadas por la OMS.
En su opinión, ante el reinicio de clases presenciales, se deben tomar medidas para a fin de prevenir la introducción y la propagación de la COVID-19 en las escuelas y la comunidad, pero también se debe garantizar la seguridad de los niños y del personal escolar mientras estén en las escuelas. Muchas de estas medidas también deben tomarse en cuenta en centros de educación superior.
Citó que el Estado Venezolano está en la Obligación de velar por que se disponga de los recursos materiales y humanos necesarios para garantizar las medidas de prevención y bioseguridad en las aulas de clases, al igual que el buen estado de infraestructuras de los centros educativos.
Subrayó que las clases presenciales deben garantizar el distanciamiento físico mínimo de un metro entre estudiantes y docentes. Los planteles educativos deben garantizar la higiene de manos, ventilación adecuada y limpieza frecuente del entorno para limitar la exposición al virus.
“Las escuelas deben formar al personal y a los estudiantes sobre las medidas de prevención de la COVID-19, establecer un calendario para la limpieza y desinfección diarias del entorno escolar, las instalaciones y las superficies que se tocan frecuentemente, disponer puntos de higiene de manos y seguir las orientaciones nacionales y locales sobre el uso de mascarillas”, indica la OMS.
Martínez exhortó presidente Maduro a revisar con los científicos este reinicio de clases, pues considera que las escuelas ni la población están preparadas para este retorno a las aulas, porque hay muchos temores, incertidumbre, miedos, debilidades en la gran mayoría de las familias venezolanas.
