Un empresario italiano y un matrimonio de la provincia de Nápoles fueron detenidos este martes por presuntamente haber enviado helicópteros y armas a Irán y Libia, con propósitos tanto en el ámbito civil como militar, notificó la fiscalía italiana.
Los detenidos son Mario Di Leva, de 69 años, su esposa, Annamaria Fontana, de 64 años, una pareja convertida al islam, y Andrea Pardi, consejero delegado de una Sociedad Italiana de Helicópteros, todos acusados de burlar el embargo internacional sobre las importaciones de armamento impuesto a ambas naciones entre 2011 y 2015.
También fue emitida una orden de captura contra un ciudadano libio pero las autoridades desconocen su paradero. Los responsables de la operación de seguridad, señalaron que el destino de estos equipos puede estar vinculado con una célula del grupo Estado Islámico.
La investigación empezó en 2011 a raíz de escuchas telefónicas a un clan de la Camorra, la mafia napolitana, donde revelaron que estaba en relación con otro sospechoso, basado en el norte de Italia, conocido de la policía por tráfico de armas.