La escasez en la variedad de anticonceptivos orales obliga a la población femenina a consumir cualquiera de las pastillas que se expenden en las farmacias de Maracaibo, que no son las indicadas para sus organismos.
En los últimos meses, solo se consigue la belara y sinovul. Esta última es traída de Colombia y es la más adquirida por las zulianas porque se vende con más regularidad; mientras que en el país vecino es gratuita.
El cambio constante de píldoras, debido a la escasez, ocasiona sangrado vaginal, retención de líquidos, pérdida del cabello, depresión, cambios de humor, incluso la inapetencia sexual, informó la ginecobstetra Nora Zerpa.
Antes, las mujeres podían ir probando diferentes pastillas porque había gran diversidad como la novial, yasmin, belara, genesa, yaz y otras. “Hoy en día no se consiguen los anticonceptivos recetados y las mujeres consumen lo que hayan, y algunas contienen altos niveles de estrógenos que causan cambios hormonales radicales. A veces las pacientes dicen no tener “ganas de nada”, detalló Zerpa, en referencia al bajo apetito sexual que presentan.
Una de las consecuencias del déficit de anticonceptivos es el aumento de los embarazos no deseados, sobre todo en las adolescentes, incrementando la tasa de gestación precoz, aseguró la doctora Patricia Castro, quien tiene cinco años laborando en el área de Ginecología del Hospital Dr. Manuel Noriega Trigo.
Muchas mujeres recurren al Sistema Intrauterino (SIU) buscando una solución para evitar la concepción, en caso de las jóvenes no se recomienda su uso. “Antes solo se indicaba a mujeres mayores de 34 años, que ya tienen hijos, hipertensas y diabéticas, pero cada día son más las mujeres que se pliegan a esta opción sin medir las consecuencias”, comentó Castro.
No todas las pastillas anticonceptivas tienen la misma composición, algunas tienen dosis más altas de estrógeno y progesterona, ocasionando problemas a pacientes que inician su vida sexual entre 18 y 21 años-, o a quienes sufren de cardiopatía o diabetes, expresó la especialista María Lara.
Algunos síntomas que presentan las mujeres son el sangrado excesivo, aumento de peso (debido a la retención de líquidos) y la caída del cabello; así como la aparición de várices, acné y problemas gástricos.
Las mujeres están tomando lo que sea, desconociendo los componentes que tienen las pastillas y los efectos secundarios que puedan causar, reveló la ginecóloga Doris Dávila. Algunas mujeres no están interesadas en informarse sobre los fármacos que consumen, solo quieren evitar quedar embarazadas, según observa la especialista en las consultas.
Alternativas
Existen opciones como los implantes subdérmicos, pero pueden generar desorden en la menstruación. Algo desconocido por las mujeres y asisten angustiadas a la consulta, expresó Dávila.
Cada caso es individual, por eso al recetar los anticonceptivos el debe valorar los niveles de triglicéridos, colesterol, examinar las mamas y tomar en cuenta el peso de la mujer para recetar el tratamiento adecuado. Otros métodos usados son: el coito interrumpido y el preservativo.
