Familiares de Johnny Rivero Guaramato (19) y Marcelo Manrique Pérez (20), negaron que estos se hubieran enfrentado con la policía, el primero en el sector Las Casitas, de La Vega, y el segundo en el barrio Monseñor Arias, de Mariches.
El viernes de 1 a 2 de la tarde Rivero estaba en su casa, bañándose, cuando llegaron comisiones mixtas, hombres encapuchados, vestidos de negro y mujeres vestidas de azul, tumbaron la puerta y entraron.
Sacaron a la madre de Rivero para la calle. Los vecinos escucharon las detonaciones provenientes de la casa, los funcionarios sacaron el cuerpo del hombre y se lo llevaron para el hospital en una camioneta pickup.
Para hacer los trámites en la morgue, la abuela de Rivero tuvo que buscar copia de una partida de nacimiento que tenía guardada, porque los funcionarios le rompieron todos los documentos, inclusive la cédula de identidad.
Los familiares de Manrique señalaron a funcionarios del Cuerpo de Investrigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), de haber entrado a la casa a las 3:30 de la tarde del viernes, sacaron a la esposa, que tiene 8 meses de embarazo, le dispararon al hombre en el pecho y lo llevaron muerto al hospital Domingo Luciani de El Llanito.
Ellos dicen que era jardinero y nunca estuvo preso, por lo que después de enterrarlo acudirán a Derechos Fundamentales de la Fiscalía General para exigir justicia.