Inspección de ambientalistas y pescadores constató la contaminación. (Foto Cortesía)
Litzy Sanz Nava || lsanz@el-carabobeno.com
Un recorrido en parte de los 17 kilómetros de costa que tiene la bahía de Amuay en la península de Paraguaná en Falcón, fue suficiente para que una comisión de la Red Manglar Internacional y de la Fundación AEPA -capítulo Falcón- detectaran la muerte de varias hectáreas de mangles y otras afectaciones al ecosistema local, a consecuencia del último derrame petrolero que hace 20 días afectó esta zona.
La caminata permitió a los participantes de la jornada, constatar la muerte de varios especímenes de animales del mar. A su vez, la excavación de unos centímetros de tierra le tenía a la expedición una desagradable sorpresa: varios centímetros de este suelo cubiertos por una capa de petróleo.
El pasado domingo 26 de octubre, usuarios de distintas redes sociales denunciaron el derrame de crudo liviano en la referida bahía paraguanera. El lunes 27, la estatal Petróleos de Venezuela, confirmó el incidente.
En el escrito Pdvsa atribuyó la situación irregular a las torrenciales lluvias registradas en la península de Paraguaná ese día, las cuales habrían generado cambios en la dirección del viento y en consecuencia, la fuga del hidrocarburo.
Tras el incidente, el personal del Complejo Refinador de Paraguaná (CRP) activó un plan de contingencia para la recolección, contención, absorción, limpieza y saneamiento de la bahía.
Henderson Colina, representante de la Red Manglar Internacional y de la Asociación Ecologista para la Preservación Ambiental de Falcón (AEPA), advirtió que pese al nivel de afectación ambiental que aún priva en la zona, el personal de la estatal petrolera se negó a continuar los trabajos de limpieza.
Ante esta situación, Colina anunció la elaboración de un informe que la Asociación que representa consignará ante los principales entes internacionales, para exigir sanciones a quienes sean responsables de este ecocidio.
Aclaró que no se trata de buscar sanciones en contra del Gobierno responsable de esta situación, sino de darle un hasta aquí a una serie de irregularidades en este histórico escenario natural, que siempre ha tenido como principal agresor a la actividad promovida por la industria petrolera venezolana, no sólo a través de los constantes derrames, sino también por la emanación de gases que -precisó- crean un efecto invernadero, causante de los cambios climáticos.
Colina reiteró el compromiso de los ambientalista de Falcón y del mundo para aportar sus conocimientos y asesorar a Pdvsa sobre los pasos a seguir para el rescate de la bahía de Amuay.
En total indefensión
El manglar se está muriendo y cientos de familias que dependen de la actividad pesquera en la zona, permanecen en un limbo laboral, tras no saber para cuándo podrán reanudar sus labores, condenó Colina quien acompañado de dirigentes comunitarios y pescadores de la zona, recorrió los espacios afectados para constatar la total indefensión en que se encuentra la zona marginada por todos los entes garantes del cumplimiento de la normativa ambiental en Venezuela.
El ecocidio dejó en un limbo laboral a cientos de pescadores, entre ellos 40 miembros de Asociación de Pescadores Artesanales de la Bahía de Amuay (Asopoba), precisó Esteban Sánchez, vocero. El trabajador aclaró que desde hace años Pdvsa es responsable de una cadena de problemas de contaminación que afectan esta zona de la región falconiana, sin que ente alguno le dé un hasta aquí.
Alertó que las acciones van en perjuicio de la zona y contradicen los preceptos redactados por el fallecido Presidente Hugo Chávez en el Quinto Plan de la Nación sobre la protección y preservación del medio ambiente.
Bacteria exclusiva
Esteban Sánchez denunció la existencia de una bacteria creada por la presencia de crudo y que se alimenta de este rubro, lo que afecta la fauna marina de la zona, en especial a los peces.
La denuncia de vieja data no ha encontrado eco en ningún ente responsable del cuidado del medio ambiente.
