Los aguinaldos se quedaron pequeños. (Foto Clemente Espinoza)
Yuraidith González
A Victoria Rensis no le alcanzarán este año las utilidades para comprar todo lo que tenía planificado porque la inflación arropó el comercio en general. En años anteriores sus aguinaldos alcanzaban para comprar una cocina o una nevera, pero el panorama cambió.
Jessi Reyes, quien trabaja para una empresa del Gobierno, solo podrá organizar una pequeña cena familiar para el 24 de diciembre con sus utilidades. Los estrenos de sus dos hijos los compró con ahorros de ella y su esposo. Y es que el alto costo de la vida no les da para hacer muchas cosas.
Los trabajadores cuentan con dos o cuatro meses de sueldo por concepto de utilidades que deben estirar para adquirir “los estrenos”, obsequios e ingredientes de las comidas navideñas.
Con el alza de los precios de las prendas de vestir y del calzado, los detallistas ya anuncian que el costo podría elevarse hasta 60% en la temporada decembrina.
Los padres deben pagar cinco mil bolívares para un pantaloncito, una camisa, un par de medias y ropa interior para sus hijos. Con respecto a los zapatos los costos están entre 850 y 3 mil bolívares.
El presidente de Fedecámaras, Jorge Roig, avizoró, hace una semana, que la inflación en 2015 alcance el 120% en caso de que el Gobierno no tome medidas como el ajuste fiscal.
El presidente de la República, Nicolás Maduro, anunció recientemente un aumento salarial para los miembros de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana de 45%, que será aplicado en escalas para los sargentos, los tenientes, los primeros tenientes, capitanes y mayores.
Muchos venezolanos no estuvieron de acuerdo con el aumento del salario para los integrantes de la FANB, debido a que el sueldo mínimo solo fue aumentado en 15%.
