La exmagistrada de la Sala Penal del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Úrsula Mujica, se unió a la defensa del caso de la tragedia en la comandancia de la Policía de Carabobo, que ocurrió en el 2018, con la intención de buscar justicia social.
Mujica afirma que su participación en esta causa es una acción de justicia social, y que buscarán en todo lo posible una sentencia condenatoria debido a que los que murieron eran seres humanos, quienes estaban bajo resguardo del Estado venezolano.
“Estaban allí detenidos preventivamente y muchos no tenían sentencia condenatoria, y además, algunos esperaban la boleta de libertad. Vamos a ponerle todo el empeño para buscar la justicia social que se requiere”, agregó la exmagistrada.
Lyli López, defensora de los DD.HH y también presidenta del Comité de Víctimas de la tragedia, sostuvo que a la audiencia del pasado 8 de diciembre acudió como órgano de prueba el funcionario Henry Chirinos, inspector agregado del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), quien estuvo presente el día de la tragedia
Chirinos estaba de guardia en la Delegación Municipal Valencia cuando recibió la llamada del director de la Policía de Carabobo, para ese momento el comisario José Aldama, para que retirara con su cadena de custodia los órganos de prueba DVR, añadió López.
El 28 de marzo de 2018, 66 privados de libertad y tres mujeres, que estaban como visitas en los calabozos de la Comandancia General de la Policía Estadal, murieron tras un incendio.
La próxima audiencia quedó fijada para el 18 de diciembre a las 10:30 de la mañana.