El deterioro es evidente. Pasado el mediodía de este viernes 14 de agosto se registró una nueva fuga en la refinería El Palito, Carabobo, esta vez en el catalizador de la planta de fraccionamiento de craqueo catalítico (FCC), esencial en el proceso de producción de combustible, según un sindicalista petrolero y fuentes internas de Pdvsa.
Eudis Girot, director ejecutivo de la Federación Unitaria de Trabajadores Petroleros de Venezuela (Futpv), explicó que no hubo un incendio sino una fuga de catalizadores y gas que se produjo luego de un intento por parte de la gerencia de la refinería de aumentar la producción de nafta catalítica y, a su vez, aumentar la capacidad de procesamiento de la planta FCC.
El maltrecho centro de refinación carabobeño estuvo paralizado desde 2017 hasta mediados de marzo de este año, cuando fue retomada la producción de combustible en niveles mínimos: entre 10 mil y 20 mil barriles diarios, de los 140 mil que es capaz de procesar. Pero no ha sido un camino fácil, sino lleno de tropiezos. En los últimos cinco meses las operaciones han sido suspendidas por diversas fallas asociadas a la desinversión y falta de mantenimiento.
Según un reporte preliminar de un operador de la refinería, no hubo lesionados producto de la fuga en el catalizador. Sin embargo, Girot advirtió que los trabajadores están en riesgo debido a las “condiciones muy inseguras” dentro de la instalación petrolera. “Presionados por el gobierno intentan producir gasolina a cuesta de lo que sea, poniendo en peligro la vida de los trabajadores”.
Hace menos de un mes, el 21 de julio, se produjeron fugas en las tuberías de la planta de crudo y en la de FCC de El Palito. Este habría sido el origen del derrame de hidrocarburo que hoy afecta los frágiles ecosistemas del Golfo Triste y el Parque Nacional Morrocoy, en Falcón. Fotografías satelitales del Laboratorio de Sensores Remotos de la Universidad Simón Bolívar (USB) así lo evidencian.
Funcionarios del Servicio Bolivarino de Inteligencia Nacional (Sebin), así como también efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), mantienen cerrada la vía Puerto Cabello-Morón en ambos sentidos, cerca del distribuidor El Palito, debido al incidente registrado en la refinería.
En medio de una aguda escasez de gasolina y gasoil que mantiene a los venezolanos en largas filas a las afueras de las estaciones de servicio para intentar surtir sus vehículos, el país se queda sin la posibilidad de producir combustible debido a la paralización de sus principales complejos de refinación.
La agencia especializada Argus reveló este jueves 13 de agosto que el Complejo de Refinación de Paraguaná (CRP), que es el segundo más grande del mundo, sigue sin capacidad de producir ni una gota de gasolina, a pesar de haber reactivado el miércoles las plantas de destilación de las refinerías Amuay y Cardón.
“Pdvsa espera que la escasez de combustible de un año se alivie en la segunda quincena de septiembre”, agregó Argus en su publicación. Funcionarios de la gerencia del CRP declararon al medio especializado en materia de energía e hidrocarburos que planean reiniciar la producción de gasolina en 10 o 15 días.
