Dayrí Blanco|@DayriBlanco07
Pérez Abad hizo lo suyo, lo de siempre: dio cifras alentadoras de producción. Esta vez se refirió a la industria del calzado. Aseguró que este año se logrará fabricar 66 millones de pares en todo el país, un número que significaría un incremento de 88,57% respecto a la meta alcanzada al cierre de 2015, pero la realidad es totalmente adversa con una contracción que permitirá llegar apenas a 42% de la meta del ministro.
35 millones de pares se manufacturaron el año pasado. Luigi Pisella, presidente de la Cámara Venezolana del Calzado (Cavecal), alertó que en 2016 la contracción será de 20% y solo se podrán contabilizar 28 millones. La principal consecuencia de esto es el mermado poder adquisitivo de la población venezolana, “los sueldos no alcanzan ni para comer completo, por eso es imposible llegar a esos números que dio el ministro”.
No es un fenómeno nuevo. La población tiene sus prioridades y la compra de zapatos no es una de ellas. En 2013 el consumo per cápita fue de 3 pares, en 2014 de 2,95, en 2015 de 1,95 y este año es de 1.2, lo que representa una disminución de más de 50%.
Los precios han sido determinantes. El año pasado un par de zapatos de material sintético costaba seis mil bolívares, hoy se ofrece en 15 mil, lo que representa un aumento de 150%, mientras que los de pieles pasaron de 12 mil a 25 mil bolívares, 108% por encima.
Exportaciones lentas
El plan de Pérez Abad es que parte de la producción sea destinada a la exportación, como una manera de generar las divisas que se necesitan y estimular la manufactura. Pero no se trata de un proceso fácil. Pisella indicó que de enero a julio se vendieron en el exterior alrededor de 20 mil pares. Solo eso. “Estamos lejos de llegar al millón”.
Si las más de 100 empresas del sector se suman a esta medida el número al cierre del año en materia de exportaciones no será mayor. “Se requiere al menos de seis meses para hacer los estudios de nichos del mercado, evaluar a los competidores y concretar los negocios”. Todo indica que las cifras en diciembre estarán muy alejadas a las proyectadas por Pérez Abad.
El presidente de Cavecol destacó que esos números fueron los presentados en agosto de 2015 como las posibilidades de incremento en la manufactura. “Pero desde ese momento muchas cosas han cambiado”, dijo al referirse a la devaluación de la moneda frente al dólar en 235% al variar la tasa de 200 a 670 bolívares.
Insumos al día
Los insumos se consiguen. Cada vez más caros pero los proveedores tienen la disponibilidad necesaria para la manufactura cada vez más mermada de calzados en el país. La mayoría de la mercancía proviene de Colombia y con la frontera cerrada ha caído en 50% el suministro, “y quienes tienen algo para la venta lo hacen a precios especulativos”, aseguró Wilmer Solano, secretario general de Fetracalzado.
También sucede con algunas materias primas que dada la merma en la producción ante las altas expectativas planteadas a finales de 2015, los fabricantes de prepararon llenando sus inventarios “y ahora tienen de todo y de sobra”, y al caer la demanda los precios hacen lo mismo.
Es el caso de las pieles sintéticas que en la mayoría de los almacenes de las fábricas hay en grandes cantidades y se corre el riesgo que se dañen porque es un material que se deteriora al perder con facilidad su consistencia.