Los privados de libertad llevan 48 años sin ingerir alimentos. (Foto Archivo/El Carabobeño)
María Eugenia Espinoza
Unos 65 detenidos en los calabozos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, penales y Criminalísticas (Cicpc), subdelegación Las Acacias, se mantienen en la huelga de hambre que iniciaron este jueves como medida de presión para exigir traslados a centros penitenciarios.
En horas de la tarde de este sábado, los detenidos no habían querido recibir sus alimentos, sumando 48 horas sin consumir comida ligera, solo agua y caramelos, según indicaron los familiares de los reclusos que se mantenían en la entrada de la comandancia.
Luisa Moreno aseguró que alrededor de 20 de los detenidos se cosieron la boca la noche de este viernes para agudizar la huelga.
El hacinamiento en las celdas de la subdelegación Las Acacias es el principal motivo para que los detenidos exijan el traslado.
Según la versión de los familiares, 25 de los reclusos tienen la boleta de traslado para el Penal de Tocuyito, pero no los han trasladado.
María Carvajal indicó que en las celdas que tienen capacidad para 10 detenidos, hay hasta 65 reos hacinados. Agregó que el calabozo de las mujeres está ocupado por los hombres.
Los reos amenazan con cortarse, iniciando una huelga de sangre si no se materializan los traslados a los centros de reclusión que ya tienen asignados para pagar su condena.
Los familiares exigen la presencia de un defensor de los Derechos Humanos en los calabozos del Cicpc.
Daniela Camacho, vinculada a uno de los privados de libertad, lamentó que ninguna autoridad se ha pronunciado ante las denuncias de los detenidos.