La fabricación de vacunas estaba a cargo de la empresa socialista para la Producción de Medicamentos Biológicos, de la cual se dijo que llegaría para satisfacer las necesidades de la población con la producción de los antígenos DTP (difteria, el tétanos y la pertussis).
Con 120 millones de dosis al año, abarcaría la mayor parte de las vacunas incluidas en el plan de inmunizaciones del Sistema Público Nacional de Salud.
En ese entonces, el coordinador de la planta productora de vacunas del Ministerio para la Salud, Gerardo Briceño, y Malva Betancourt del Instituto Nacional de Higiene Rafael Rangel, dijeron que la creación de la planta autónoma y funcional de biológicos de alta tecnología, como lo propuso Hugo Chávez, se había cumplido: Espromed Bio se oficializó a través de la Gaceta Oficial número 412.459, de fecha 12 de junio de 2014, publica Crónica Uno.