“Mientras no poseía más que mi catre y mis libros, fui feliz. Ahora poseo nueve gallinas y un gallo, y mi alma está perturbada. La propiedad me ha hecho cruel. Siempre que compraba una gallina la ataba dos días a un árbol, para imponer mi domicilio, destruyendo en su memoria frágil el amor a su antigua residencia. Me aislé, fortifiqué la frontera, tracé una línea diabólica entre mi prójimo y yo. Dividí la humanidad en dos categorías; yo, dueño de mis gallinas, y los demás que podían quitármelas. Despedí a pedradas al intruso, pero saltaban el cerco y aovaron en casa del vecino. Reclamé los huevos y mi vecino me aborreció. Desde entonces vi su cara sobre el cerco, su mirada inquisidora y hostil, idéntica a la mía. Sus pollos pasaban el cerco, y devoraban el maíz mojado que consagraba a los míos. Los pollos ajenos me parecieron criminales”. Rafael Barrett
Ahora, los estómagos agradecidos por los efectos de la corrupción o los amores comprados a precios de Dubái, pueden minar la estabilidad política; socavar sus bases y como consecuencia ganarse la antipatía de aquellos que en sus momentos fueron sus consecuentes partidarios. Conforme a la circunstancias, la pudrición afianza el terreno para que se lleven a cabo movimientos en relación con la jugarreta instituida e incluso con el terrorismo; ya que los forajidos se ven favorecidos por la complicidad de funcionarios públicos infectos, el cual es un trasgresión donde no es necesaria el uso de la visa.
Es importante considerar, lo que sucedió en Argentina en las elecciones presidenciales de este domingo diecinueve de noviembre, donde se impuso Javier Milei, un hombre con pocos años ocupando espacio en la política nacional de ese país, y que desde un principio se veía con pocas probabilidades de derrotar al candidato del oficialismo Sergio Massa, ministro de Economía, se debe en buena medida, a la crisis económica que vive ese país, además de la corrupción de varias décadas del gobierno de la pareja Kirchner, es un ejemplo de que el bolsillo siempre tiene un elevada influencia en el razonamiento . De este dúo de los Kirchner se dice que son dueños de buena parte de los terrenos que parten de Calafate en la Patagonia hasta las cercanías de Buenos Aires; por supuesto que este exceso es una figura retórica…
Sin embargo, debemos reconocer que el gobierno del presidente argentino Alberto Fernández, al margen de tener una inflación tan elevada que compite con Venezuela, alto desempleo, un país que dejó de ser lo que una vez fue, acepta la alternabilidad que es uno de los principios básicos que diferencia a las democracias de las dictaduras. Puede haber, y los hay, malos gobiernos democráticos, pero la diferencia está en que en las democracias pueden ser echados al cumplir su periodo; no así en las dictaduras o tiranías donde no se respetan los derechos y libertades individuales. Los venezolanos vimos con cierta envidia cómo se desarrollaba todo el largo proceso electoral para escoger al nuevo mandatario. Desde las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO). De allí a las elecciones presidenciales, luego al balotaje o segunda vuelta; cuatro meses controversiales, de discusiones muy ácidas, debates, de pactos y acuerdos. Finalmente, con el sistema de votos manuales solo bastaron dos horas para tener los resultados sin ningún tipo de contratiempos.
Los venezolanos dentro de menos de un año, probablemente, iremos a elecciones presidenciales agarrados de un acuerdo firmado en la isla de Barbados. Las fuerzas de la oposición ya tienen su candidata, María Corina Machado, escogida en una elección primaria con un poco más de 92 % de los votos a su favor, donde no hubo segundo lugar... Mientras tanto el candidato del régimen día a día pierde apoyo, se hunde en el barro del desprecio y aversión del pueblo.