(Foto EFE/Referencial)
AVN
El Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), a través de su Sala Constitucional, sentenció que el decreto ejecutivo firmado el pasado 9 de marzo por el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y en el que señala a Venezuela como «una amenaza inusual y extraordinaria», carece de validez con relación a Venezuela y sus habitantes.
El fallo determinó que el referido acto del Gobierno estadounidense «vulnera todas las fuentes del Derecho Internacional y contraría la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, así como los más emblemáticos criterios jurídicos y éticos de la humanidad», refiere una nota de prensa del máximo órgano de sistema judicial de Venezuela.
Así, la Sala Constitucional dictaminó que el Decreto Orden Ejecutiva vulnera los derechos humanos de los venezolanos y las venezolanas, y, en general, de todos sus destinatarios, en consonancia con lo establecido en la histórica decisión de esta Sala N° 100 del 20 de febrero de 2015, en relación a su norma base, como lo es el documento denominado «Ley para la defensa de los derechos humanos y la sociedad civil en Venezuela 2014», cuyos efectos fueron desestimados por igual, agrega la nota.
En ese sentido, el instrumento firmado por Obama, así como otras medidas de autoridades estadounidenses, «serían un conjunto de acciones injerencistas de expresa ilegitimidad, nacional e internacional, circunstancia generadora de responsabilidad interna e internacional de ese Estado y las autoridades respectivas, ante su pueblo y ante la Comunidad de Naciones».
Esta decisión se produce a instancia de un recurso presentado por el abogado Oleg Alberto Oropeza Muñoz, a los fines de obtener la protección a la integridad de la Constitución del país latinoamericano.