EFE
La
comisión parlamentaria que investiga el asesinato y la desaparición de un grupo
de mineros en el estado Bolívar recabó denuncias de otras diez personas que, al
parecer, han corrido la misma suerte, aseguró este martes su presidente, el
diputado opositor Américo de Grazia.
«Hemos recibido diez denuncias de diez desaparecidos distintos de diez zonas
mineras diferentes» del estado Bolívar, donde el asesinato de mineros
«es una práctica común» en las minas de oro de Venezuela, afirmó el
diputado.
De Grazia informó a los periodistas de las nuevas denuncias de familiares y
testigos, al dar cuenta de que el gobernador del estado Bolívar, Francisco
Rangel, no se presentó hoy en Caracas ante los diputados que investigan lo
sucedido y que lo habían citado.
«Nos preocupa que la primera autoridad de Bolívar no se haya sumado»
a quienes colaboran con esta comisión «para esclarecer estos hechos, para
revisar sus causas y lograr que no se repitan», declaró a su vez junto a
De Grazia la diputada también opositora Olivia Lozano.
Lozano, De Grazia, y el también diputado por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Luis Silva revelaron las preguntas dirigidas al
gobernador Rangel, quien un día después de la masacre dijo que era
«absolutamente falsa» la denuncia de «personajes de la
derecha» sobre las muertes de los mineros.
De Grazia aseguró que, aunque las autoridades venezolanas sostienen que el 4 de
marzo fueron ejecutados 17 mineros y diez días después hallados sus cuerpos,
los testigos insisten en que fueron 28 los cuerpos trasladados en un camión.