Ingram lo secundó en las labores ofensivas. Foto cortesía: nba.com.

El alero Zion Williamson brilló en su juego ofensivo y aportó 37 puntos, incluidos 14 en el cuarto periodo, que le permitieron a los Pelicans de Nueva Orleans vencer por 101-94 a los Sixers de Filadelfia.

Williamson anotó los primeros seis puntos del último cuarto y ocho de los primeros 10 de los Pelicans, extendiendo una ventaja de ocho tantos a 86-71. El alero también concretó tres veces más, después de que los Sixers se acercasen en el marcador con parcial de 94-87.

Williamson acertó 15 de 28 tiros de campo y se quedó a las puertas de un triple-doble. Después agregó 15 rebotes y ocho asistencias. El ala-pívot Brandon Ingram regresó con el equipo, tras haberse perdido cinco partidos con una lesión en el pie derecho y logró 17 tantos, pero sólo marcó 5 de 21 tiros de campo.

Junto a la inspiración encestadora de Williamson, los Pelicans hicieron una gran defensa y el aporte del pívot Willy Hernangómez, que salió 19 minutos como reserva, fue decisiva. El entrenador de Nueva Orleans, Stan Van Gundy, confió en el juego interior del español, quien respondió con un doble-doble de 10 puntos y 10 rebotes.

El ex jugador del Real Madrid tuvo una excelente selección de tiros a canasta con 5 de 6 todos dentro de la pintura, capturó siete rebotes defensivos, y perdió solamente una vez el balón.

Filadelfia, que perdió la oportunidad de empatar a los Brooklyn Nets con el mejor récord de la Conferencia Este, empató un mínimo de la temporada con 94 puntos. Embiid, quien había anotado 59 puntos en dos partidos anteriores, obtuvo 14 unidades en 5 de 16 tiros de campo.

Sus compañeros de equipo lucharon tanto como él contra los Pelicans, que habían cedido 123 puntos a los Atlanta Hawks y 139 a Brooklyn, en sus dos últimos desafíos. El alero Tobias Harris lideró a los Sixers con 23 tantos, pero nadie más que él o Embiid obtuvo más de cuatro lanzamientos de campo.

Embiid tuvo su total de puntos más bajo desde que anotó nueve contra Miami Heat, el 14 de enero. Los Sixers terminaron 11 de 31 en triples y bajaron su marca a 35-17 para seguir en el segundo puesto de la Conferencia Este.

Mientras que, el base Lonzo Ball, tras haber jugado los tres últimos partidos con los Pelicans, volvió a quedarse fuera de acción debido a un problema en la cadera derecha.




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