La solicitud de Ucrania para unirse a la Unión Europea podría avanzar el viernes con una recomendación del brazo ejecutivo de la UE de que el país devastado por la guerra merece convertirse en candidato para ser miembro del bloque de 27 naciones.
El respaldo de la Comisión Europea, si bien es solo un paso tentativo en un camino que podría demorar décadas en completarse, enviaría un fuerte símbolo de solidaridad con Ucrania y pondría a prueba aún más el frente unido de la UE contra Rusia en medio de la invasión de su vecino.
Aquí hay un vistazo a lo que podría significar para la región el anuncio de la comisión sobre convertir a Ucrania en un candidato de la UE.
Encontrar el equilibrio adecuado
Ucrania solicitó la adhesión a la UE menos de una semana después de que Rusia invadiera el país y mientras la capital, Kyiv, enfrentaba la amenaza de captura y la caída del gobierno ucraniano.
La urgencia creada por la guerra y la solicitud de Ucrania para una consideración acelerada podrían cambiar el enfoque lento del bloque para la ampliación.
El jueves, los líderes de Francia, Alemania, Italia y Rumania visitaron Ucrania y prometieron respaldar la candidatura oficial de Kiev. El primer ministro italiano, Mario Draghi, calificó la candidatura de la UE para Ucrania como «un paso muy profundo» y señaló que Ucrania superaría a las naciones balcánicas, si se le otorga el estatus. Pero Draghi dijo que la situación en Ucrania es «extraordinaria».
Darle a Ucrania el estatus de candidato desafiaría el libro de jugadas normal de la UE para agregar miembros. Se espera que los líderes de los países miembros de la UE consideren la recomendación de la Comisión Europea la próxima semana.
Los líderes se enfrentan a un delicado acto de equilibrio: señalar a Ucrania que la puerta de la UE está entreabierta mientras aseguran a otros aspirantes a miembros y a algunos de los propios ciudadanos del bloque que no están mostrando favoritismo hacia Kyiv.
¿Ampliar o no ampliar?
La Unión Europea nació en la década de 1950 para evitar otra guerra entre Alemania y Francia. Los seis miembros fundadores fueron Bélgica, Francia, Alemania, Italia, los Países Bajos y Luxemburgo.
Desde entonces, la UE se ha expandido de manera constante al mismo tiempo que defiende la idea de que la integración económica y política entre las naciones es la mejor manera de promover la paz y la prosperidad general. Este enfoque allanó el camino para la creación del euro en 1999 y para la incorporación en 2004 de 10 nuevos países miembros, la mayoría de la antigua Europa del Este comunista.
El euro, que 11 países adoptaron inicialmente como su moneda oficial, destacó la capacidad de la UE para profundizar la integración económica y política entre las naciones de la UE. La ampliación del “big bang” cinco años después mostró la capacidad del bloque para ampliar su alcance.
A medida que se desarrolla el mayor conflicto militar en Europa desde la Segunda Guerra Mundial en la frontera oriental del bloque, la UE se enfrenta de nuevo a preguntas persistentes sobre su capacidad para profundizar y ampliar, los puntos de referencia informales que utilizan los expertos para seguir la evolución de décadas del bloque.
¿Por qué falta consenso?
El consenso interno que sustenta este enfoque de doble vía para el progreso de la UE se había debilitado años antes de que Rusia invadiera Ucrania.
La crisis de deuda de la zona del euro que estalló en 2010, una ola de migración masiva en 2015 y la sorprendente decisión del referéndum de 2016 del Reino Unido de abandonar la UE contribuyeron al nerviosismo de la UE para expandir sus filas.
También lo hizo el crecimiento de las fuerzas políticas euroescépticas en muchos países miembros, incluidos Alemania, Francia e Italia. Algunas naciones de la UE han acusado a los gobiernos de Berlín, París y Roma de mostrar un apoyo político insuficiente a Ucrania mientras se defiende de Rusia.
La visita del jueves a Kyiv del canciller alemán Olaf Scholz, el presidente francés Emmanuel Macron, el primer ministro italiano Mario Draghi y el presidente rumano Klaus Iohannis podría ayudar a contrarrestar tales críticas.
Estado de candidato
La reunión de los líderes con el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy y las expresiones de apoyo a Ucrania coincidieron con las negociaciones entre bastidores de la Comisión Europea sobre la próxima opinión sobre si Ucrania merece el estatus de candidato.
Un grupo de países de la UE que incluía a Polonia quiere el máximo respaldo para Ucrania, mientras que otros, como los Países Bajos, favorecen una postura más cautelosa.
La comisión también planea emitir sus recomendaciones para Georgia y Moldavia, que se apresuraron a solicitar su ingreso en la UE en marzo.
El grado en que la solicitud de Ucrania de una adhesión acelerada representa un cambio en el procedimiento operativo estándar de la UE es evidente a partir de las experiencias de otros aspirantes a miembros.
Turquía, por ejemplo, solicitó la membresía en 1987, recibió el estatus de candidato en 1999 y tuvo que esperar hasta 2005 para iniciar las conversaciones para la entrada real. Solo uno de los más de 30 «capítulos» de negociación se ha completado en los años transcurridos desde entonces, y todo el proceso está paralizado como resultado de varias disputas entre la UE y Turquía.
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