El estreno en cines comerciales de la película venezolana «Simón» pudiera estar en pico e’ zamuro porque un grupo oficialista ya se activó para censurarla. La cinta dirigida por Diego Vicentini fue la ganadora del Festival de Cine Venezolano, realizado en Mérida en julio pasado, donde se alzó con seis galardones: Mejor Película, Mejor Director, Mejor Actor de Reparto, Mejor Fotografía, Mejor Edición y Mejor Guion.
Ahora, a dos días de su estreno comercial en cines de Venezuela, el abogado Gabriel Costanzo introdujo una denuncia ante la Dirección General contra Delitos Comunes del Ministerio Público para evitar que la película «Simón» llegue a las salas, reseñó el portal Tal cual digital.
Argumenta el denunciante, un burócrata que ha sido juez temporal de menores y ha trabajado para la Defensoría del Pueblo, que la cinta promueve la violencia en el país y desarrolla «un discurso cinematográfico explícitamente violento y amenazante». Además, afirma que en el filme se hace apología de delito del terrorismo y del odio.
Si la Fiscalía y algún tribunal finalmente accionan contra la película, se trataría de la primera vez que se produce una censura abierta contra una cinta que el propio sector cultural del cine en Venezuela ha resaltado como estupenda, premiándola seis veces en el Festival de Cine de Mérida.
¿Por qué al oficialismo no le gusta esta película? La cinta relata la historia de Simón, interpretado por Christian McGaffney, un venezolano que solicita asilo político en Estados Unidos luego de protestar fuertemente contra el gobierno nacional en 2017.
Al ganar en Mérida, el director Vicentini envió un mensaje que decía: «Esta es la historia de aquellos que fueron reprimidos, quebrados y silenciados. Es la historia de millones que se han ido del país y dejaron atrás su hogar. Por encima de todo Simón es un abrazo. Todos los venezolanos llevamos una herida profunda, un dolor que no podemos olvidar. Lo que necesitamos es sanar, seguir adelante».
El Centro Nacional Autónomo de Cinematografía –que ahora preside el muy chavista militante Carlos Azpúrua– nunca reconoció que el largometraje fue el triunfador en Mérida, y decidió ni siquiera publicar los resultados del Festival en sus redes oficiales.
Esta no sería la primera vez que se impondría la censura pues ya pasó con la película sobre la historia del boxeador Edwin «El Inca» Valero, impedida de mantenerse en los cines del país en 2016 cuando fue sacada apenas luego de haber sido estrenada
Ante esto, no queda otra que apelar a que toda la sociedad, comenzando por el sector cultural, haga lo necesario para que un producto cinematográfico de ficción pueda ser mostrado a las audiencias, cumpliendo la Ley de Cine vigente -que garantiza dos semanas de exposición como mínimo a todo estreno criollo-, y permitiendo que el séptimo arte no caiga, también, bajo la bota.
Fuente: Tal cual digital
