El lunes 10 de julio un trancazo de 10 horas era la nueva protesta del día. Todo parecía tranquilo hasta que pasadas las 5:00 p.m dos jóvenes eran heridos de bala. Uno murió, Rubén Darío González de 16 años, y el otro joven identificado como Edisson Testa, sobrevivió.
Rubén Darío murió con rapidez, la bala que impactó su pecho le causó un daño tremendo que no pudo soportar. La gente del sector cinco de La Isabelica lo vio. Y algo parecido sucedió con el otro muchacho que fue trasladado al ambulatorio de La Isabelica. Un rumor afirmaba la muerte de un segundo joven, sin embargo todo es falso. Su estado es estable.
Testa, de 18 años, recibió dos disparos. Uno de los proyectiles perforó su pierna derecha y se quedó alojado cerca del fémur, mientras que la otra bala atravesó la pierna izquierda y rozó el testículo izquierdo, el cual quedó herido y comenzó a sangrar. Los médicos lograron atenderlo a tiempo y controlaron la hemorragia que presentaba.
Se espera que el joven sea intervenido quirúrgicamente en las próximas horas, para reconstruir el testículo dañado por el roce del proyectil.